Volvo XC40 2018, primer contacto

El benjamín de la familia XC de Volvo llegará al mercado en febrero. Animado por una estética más fresca y personalizable, así como por una dinámica de conducción exquisita, el nuevo Volvo XC40 se pondrá a la venta por 42.220 €.

Texto: Karam el Shenawy

Volvo XC40 2018, primer contacto
(fotos)

[fotos id=”96491″]

A estas alturas, hablar de la voracidad de los SUV con el sector del automóvil es casi entrar en reiteraciones. Tal es su influjo que no importa el segmento o el tipo de marca del que hablemos, que allí habrá un todocamino dispuesto a complacer a sus clientes. Volvo es uno de esos fabricantes que ha apostado desde hace unos años por dichos modelos. El pistoletazo de salida lo dio el XC90, al que más tarde siguió el XC60 y al que ahora se une el XC40

De esta forma, la sueca estará presente en los tres subsegmentos SUV más importantes: grandes todocaminos, todocaminos medios y todocaminos compactos, tal y como llevan haciendo desde hace tiempo algunos rivales directos de Volvo como Audi, BMW, o Mercedes-Benz. En concreto, el nuevo XC40 entraría en competencia con los Q3, X1 y GLA, respectivamente, ya que ofrece una carrocería de 4,43 metros de largo, 1,86 de ancho y 1,65 de alto, cotas que, igualmente, le harán rivalizar con los Jaguar E-PACE, Range Rover Evoque, Lexus NX

Volvo XC40 2018, sobriedad juvenil

Para conseguir su trozo del pastel, Volvo tiene claro que el diseño es una de los principales elementos que decantan la balanza en el momento de la compra. De ahí que el XC40 mantenga ese estilo serio y moderno de sus hermanos mayores (con un frontal robusto con las luces diurnas en forma de martillo de Thor), pero añadiendo un toque desenfadado y juvenil nunca visto antes en la firma escandinava… a excepción del C30. Cualidad que viene determinada, principalmente, por la posibilidad de adquirir el techo en un color diferente al de la carrocería (blanco o negro) y que le convierte en el primer Volvo bicolor de la historia.

Otro elemento distintivo de su exterior es la zaga. El portón gana presencia obligando a los grupos ópticos traseros (verticales) a meterse de lleno en la línea lateral. El conjunto se completa con llantas de aleación que van de las 17 a las 21 pulgadas y con las típicas protecciones de plásticos negras situadas a lo largo de todo el perímetro inferior de la carrocería.

Volvo XC40 2018, espacio Premium

De puertas para dentro, el salpicadero hereda la estructura estética de los XC90 y XC60, aunque con diferencias notables. Si bien mantiene la pantalla táctil de 9,0 pulgadas en posición vertical, esta última da la sensación, a la vista, de ser más pequeña. Desde ella se manejan todas las funciones del vehículo, ya sea la climatización, equipo de audio, navegación e incluso los asistentes de conducción. Igualmente, mantiene el cuadro de instrumentos digital.

Sin embargo, este XC40 cambia todo lo relativo al túnel central. Empezando por el botón de arranque, colocado en la columna de dirección y siguiendo por el control dinámico de la conducción, el cual se sitúa en la consola central, bajo la comentada pantalla vertical.

El pomo de la caja de cambios también es nuevo. Es pequeño en dimensiones y requerirá cierto periodo de adaptación para pasar de D a R, ya que será necesario realizar dos toques. En la parte delantera, se ha destinado un enorme hueco para depositar el móvil y, ya de paso, cargarlo de forma inalámbrica (primicia en un modelo escandinavo).

En este sentido, Volvo ha querido otorgar cierto grado de practicidad al XC40, incluyendo multitud de huecos portaobjetos repartidos por el habitáculo. De todos ellos, destaca el de las puertas. Y es que la firma escandinava ha suprimido los altavoces para así, según ellos, ofrecer el hueco más grande del sector. Además, para darle ese toque de calidad, lo ha recubierto totalmente con el mismo guarnecido que el techo.  

Porque si nos centramos en la calidad, no encontramos pero alguno. Puede que en comparación con sus dos hermanos mayores, el XC40 sea algo más sencillo, pero aun así está excelentemente terminado. Ofrece materiales mullidos y los ajustes son sobresalientes, aunque, como decimos, la sensación de robustez es menor que la del XC60, circunstancia que palia con toques chic como el atrevido tapizado Lava Orange que estaba presente en algunas de las unidades de la presentación, o por una calidad de rodadura y un confort de marcha difícilmente igualable por sus competidores más directos.

A todo ello se suma una habitabilidad excelente. La nueva plataforma modular CMA destinada a los nuevos modelos compactos de la marca, le brinda un espacio interior notable. Delante, los dos ocupantes no tendrán problema alguno para acomodarse en unas butacas anchas y bien mullidas, mientras que en la parte posterior nos da la sensación de tener casi el mismo hueco para las piernas y para la cabeza que en el XC60. Aquí, tres adultos se colocarán con relativa facilidad gracias a la a anchura disponible y a que el túnel central no resulta demasiado invasivo para el que ocupe dicha plaza.

En cuanto al maletero, con apertura y cierre eléctrico del portón y función de apertura con manos libres, el XC40 nos brinda un volumen de carga excelente, en la media con sus rivales directos, pues los 460 litros de capacidad superan los 421 del GLA, le igualan con el Q3 y le dejan a solo 45 del X1.

Un poco más lejos se quedan los 575 litros del amplísimo Evoque. Si queremos gozar de un mayor hueco, solo habrá que abatir la segunda fila (en sección 60:40) y obtener 1.336 litros. Del mismo modo, si queremos contar con rueda de repuesto, habrá que pagarla aparte ya que de serie incorpora el kit antipinchazos.

Volvo XC40 2018, dos para empezar

Desde su llegada al mercado, prevista para el mes de febrero (aunque ya se pueden realizar pedidos), el XC40 podrá adquirirse con dos motores, uno gasolina y otro diésel, ambos de cuatro cilindros y 2,0 litros. El primero, el T5 Drive-E desarrolla 247 CV y 350 Nm de par, disponibles entre las 1.800 y las 4.800 vueltas. Únicamente se combina con la caja de cambios automática de ocho relaciones y con la tracción total.

Este propulsor empuja con contundencia los 1.755 kilos de peso del XC40 (un valor ligeramente alto), mientras que la sonoridad es prácticamente mínima. Como decíamos, el confort de marcha es elevadísimo y la rapidez del cambio automático permite que disfrutemos en cualquier circunstancia.

La otra opción es el conocido diésel D4 con 190 CV y 400 Nm de par máximo, que aparecen en el rango de las 1.750 a 2.500 rpm. Gracias a los 50 Nm de adicionales de par, la respuesta es más contundente, mientras que su condición de diésel permite que el gasto se rebaje considerablemente, en concreto hablamos de 5,1 l/100 km frente a los 7,3 del T5… y eso que además de estar asociado a la misma combinación de caja-tracción, el D4 pesa 48 kilos más.

Más adelante, llegarán las dos versiones de acceso en ambos combustibles, el D3 de 150 CV, asociado a la caja manual y a la tracción delantera; y el T3 con 1,5 litros y 150 CV, que será el primer motor tricilíndrico de la marca. Todo ello sin olvidar, cómo no, las variantes híbridas (aún está por determinar si enchufable o ‘normal’) y 100% eléctrica. Sí, porque la nueva plataforma CMA, desarrollada en conjunción con Geely, permitirá a Volvo ofrecer los primeros modelos eléctricos puros, con rangos de autonomía que aún están por determinar.

Volvo XC40 2018, al volante

Durante la toma de contacto realizada por Barcelona y alrededores, pudimos conducir tanto el D4 como el T5. Como decíamos con anterioridad, ambos destacan por ofrecer un confort de marcha excepcional, que viene secundada por una pisada contundente y una ausencia casi total de ruido o vibraciones. Por carretera abierta, la suspensión filtra con pasmosa facilidad cualquier irregularidad, más aún si seleccionamos el modo Comfort del control dinámico de la conducción. Los kilómetros pasan sin darnos cuenta, mientras que el amplio elenco de asistentes de seguridad y ayudas a la conducción nos permiten mantener la atención en todo momento.

Salimos de la autopista para comprobar si ese excesivo peso se deja notar en su dinámica de conducción. Antes de que aparezcan las primeras curvas, colocamos el selector en modo Dynamic, notando cómo el acelerador se vuelve más sensible, el rango de revoluciones se estira algo más y tanto dirección como suspensión se endurecen.

Con el primer giro frente a nosotros, tiramos de volante y… nada, todo es suavidad y buen hacer. El chasis está perfectamente ajustado, lo que repercute en un comportamiento que merece una nota cercana al diez. No hay signo alguno de inercias ni de balanceo ante un cambio de apoyo algo más acusado. El XC40 mantiene ese aplomo y esa contundencia antes mencionada, consiguiendo algo que no suele ser fácil en este segmento, que nos divirtamos al volante.

Volvo XC40 2018, pago por uso

Una carencia que paliará con los comentados sistemas de asistencia, entre los que destacan el asistente de conducción semi-autónoma Pilot Assist, el City Safety, la atenuación de salidas de la calzada, la protección en caso de salida de la vía, la alerta de cruce con freno automático, la cámara de 360º o el sistema de alerta por tráfico cruzado trasero con asistente de frenada (primicia en el segmento), entre otros.

Además, el XC40 estrenará un nuevo servicio de contratación on-line denominado Care by Volvo. En esencia se asemejaría a cualquier opción de renting del mercado, pues el conductor únicamente se haría cargo de una cuota mensual 699 €, para un periodo de 24 meses y 15.000 kilómetros anuales, en la que irían incluidos todos los cuidados del coche (mantenimiento, revisiones, seguro…) así como servicios de repostaje, limpieza, recogida para mantenimiento o entrega de las compras realizadas por comercio electrónico en el propio vehículo.

No obstante, para quienes prefieran tener el XC40 en propiedad, decir que el nuevo SUV compacto sueco se pone a la venta en dos acabados, Momentum y R-Design por un precio que parte de 42.220 € para el D4 y de los 47.257 € para el T5.

Adicionalmente e independientemente de la opción de adquisición contratada, los conductores del XC40 serán los primeros clientes de Volvo que podrán compartir su vehículo con su familia y amigos mediante la aplicación Volvo on Call, gratuita en Apple Store y Google Play con la que podrán abrir o cerrar el coche a distancia siempre alguien se lo solicite y arrancarlo para que inicie la marcha. En definitiva, Volvo no solo se adentra en un nuevo terreno con este XC40, sino que se moderniza para llegar a un público más juvenil, más desenfadado y, sobre todo, más actual.

Entrada Relacionada