Era cuestión de tiempo que Volvo presentara un modelo completamente dedicado al confort de los pasajeros traseros, algo absolutamente venerado en el mercado chino.
El salón de Pekín le ha venido muy bien a Volvo para presentar lo que es, para ellos, una perfecta limusina. El Volvo S90 Excellence copia la idea que ya introdujo el XC90 Excellence, que no es otra que llevar a límites muy altos el confort de los pasajeros de la fila trasera, los absolutos protagonistas. Se ha reproducido en la nueva berlina, un ejercicio que no tiene otro fin que contentar al mercado chino.
El conductor en segundo plano
Parece que nadie ha pensado en el conductor a la hora de crear este, todavía, concepto de Volvo S90 Excellence. Solo hay que fijarse en su asiento y ver que hay una semi mampara que lo separa del resto del habitáculo. Y es que ese “resto” es precisamente lo que importa, lo único que importa. Este XC90 limusina está llamado a ser el próximo tope de gama de la firma sueca.
Los dos asientos traseros son individuales y disponen de múltiples reglajes eléctricos. El confort lo es todo, de modo que también son calefactados y ventilados. El asiento del copiloto ha dicho adiós para ofrecer mayor visión a los pasajeros traseros pero, sobre todo, la posibilidad de apoyar los pies o utilizar una mesilla de grandes dimensiones. No falta una nevera y un par de copas fabricadas por el especialista Orrefors para disfrutar de un brindis en las reuniones de negocios.
Aunque por ahora no sea más que el corte de un interior, un prototipo, Volvo lanzará antes o después una versión de estas características, destinada principalmente a ejecutivos que no duden en realizar reuniones o trabajar en sus trayectos en coche. China es un mercado clave en este sentido, y probablemente uno de los primeros mercados los que llegue la versión de producción.