El Volkswagen T-Roc R-Line amplía el equipamiento del modelo con la llegada de este nuevo acabado, que permitirá al todocamino exhibir su lado más deportivo sin perder un ápice de su perfil campero.
Esta nueva opción llega para situarse como cúspide de la oferta comercial del Volkswagen T-Roc, que apareció a finales de 2017, y se sitúa por encima de los acabados Edition, Advance, Advance Style y Sport. Ahora solo falta por conocer si, además de este acabado, se ofrecerán paquetes R-Line para la carrocería y el habitáculo en los acabados inferiores (como ya sucede en otros modelos de la firma alemana, por ejemplo, el Volkswagen Golf , el Passat o el Tiguan ).
El acabado R-Line implica la llegada de unos paragolpes nuevos con un diseño más envolvente, faldones laterales, un alerón trasero en la parte superior de la luna, un nuevo difusor trasero y unas llantas de aleación de 19 pulgadas.
Mientras, en el interior, se incluyen, entre otras novedades, un volante multifunción en cuero perforado y costuras en contraste, pedales de acero inoxidable y alfombrillas específicas. Pero no solo eso, ahora el logo R-Line se podrá ver en el mensaje de bienvenida de la pantalla del salpicadero, en el volante y en la palanca de cambios, también forrada en cuero, como el reposabrazos central.
Por el momento, en España no se ha confirmado cuáles serán las mecánicas a las que podrá ir asociado el acabado R-Line, aunque en el Reino Unido está disponible junto a los propulsores de gasolina 1.5 TSI de 150 CV, con caja de cambios manual de 6 relaciones o automática DSG de 7, y 2.0 TSI de 190 CV, con cambio DSG de 7 marchas, además del diésel 2.0 TDI de 150 CV con caja de cambios manual de 6 velocidades.
Al país británico llegará con un precio de salida de 30.285 euros, pero en España tendremos que esperar para conocer su importe.