La consulta de las redes sociales y el consumo de alcohol y drogas durante la conducción son las conductas más peligrosas de las que realizan el resto de los automovilistas, según se desprende de la tercera edición de la “Encuesta sobre la cultura de la seguridad” que ha realizado la consultora británica IAM RoadSmart.
El 90% de los entrevistados entiende que la interacción con las redes sociales, la redacción de mensajes o la lectura de mails mientras se conduce pueden generar situaciones de auténtico peligro al volante. Esta cifra ha crecido un 80% respecto al último estudio, lo que representa un aumento sin comparación en los tres años en los que se lleva elaborando esta encuesta.
De hecho, este ‘miedo’ se ha situado a la misma altura que el temor a que otros conductores consuman drogas o alcohol, algo que preocupa al 90% de los encuestados, un 64% más que hace tres años. Y eso que hasta el 50% de los preguntados confiesa conocer los riesgos que conllevan la ingesta de estas sustancias a la hora de manejar el coche.
En el estudio también se muestra el temor de los conductores a que otros hablen por teléfono (89%), superen la velocidad en calles residenciales (87%), ignoren los semáforos en rojo (87%), que estén cansados y con sueño (86%) o que sean agresivos en su manera de conducir (75%).
Incorrectos al volante
Una cosa es tener miedo de lo que hacen los demás y otra muy distinta admitir que uno practica esas mismas acciones (que, vistas en otros, se entienden como temerarias). Así, los encuestados admiten que, en un 55% de los casos, conducen a la misma velocidad que el resto de vehículos, mientras que uno de cada siete reconoce ir incluso más rápido que los demás.
Y eso que el 50% cree que es inadmisible superar la velocidad máxima de la vía en 15 km/h, una cifra que alcanza el 90% cuando se trata de superar en tan solo 5 km/h los límites establecidos en las inmediaciones de un colegio.
En cuanto al problema del uso del móvil al volante, el 45% cree que no es peligroso hacerlo con un sistema de manos libres, mientras que el 9% entiende que es muy arriesgado hacerlo sujetando el teléfono con una mano apoyada en una oreja.
Es por esto que algunas voces piden un endurecimiento de las penas respecto a algunas acciones, como la consulta de las redes sociales mientras se conduce (96%) o hablar por teléfono móvil sin sistemas manos libres.
Además, el 93% agradecería exámenes más exhaustivos para los mayores de 85 años, un porcentaje que queda en el 91% entre quienes piden el mismo endurecimiento entre los mayores de 75 años.