El 4×4 de la firma japonesa acaba de mostrarnos una nueva generación que incluye significativas novedades, entre ellas la electrificación, pero deja intacta su esencia campera.
En plena era electrificada y con las miras puestas en el 2035 donde se dejarán de comercializar coches de combustión que no lleven combustibles sintéticos, aparece una marca como Toyota para mostrarnos el oasis en el desierto. Y es que aunque la firma nipona está igualmente sumergida en un proceso de electrificación no es para nada ajena a que existen otros sistemas de propulsión tales como el hidrógeno. Dicho esto, su último lanzamiento no huye de una movilidad electrificada pues como te contaremos más adelante el nuevo Land Cruiser también será un modelo híbrido autorrecargable.
El genuino todoterreno japonés, que lleva vigente nada menos que 71 años (se lanzó al mercado en 1951) con casi 12 millones unidades comercializadas en todo el mundo, acaba de desvelar su nueva generación envuelta en un sinfín de novedades. La primera, la plataforma pues por primera vez compartirá chasis con el Land Cruiser 300 que se basa en la GA-F de Toyota. Esto le permitirá mantener todas las cualidades off road que le caracterizan sumando en este caso un 50% más de rigidez y un mayor confort cuando se circula por carretera.
Dicho esto, hablamos de un coche que estéticamente cambia por completo acercándose en cierto modo al FJ y homenajeando a los Land Cruiser pasados, con unas formas cuadradas y con dos estilos dependiendo de si elegimos la versión 250 o la 70, a escoger entre faros cuadrados o redondos, paragolpes más robustos y detalles de diseño específicos. Con todo, hablamos de un coche que crece en tamaño hasta llegar a los 4,92 m, lo que implica haber crecido en 10 cm, cota que acompaña de una anchura de 1,98 metros (+9,5 cm) y de una altura de 1,87 metros (+2 cm) completándose con una distancia entre ejes de 2,85 m (+6 cm).
De puertas para dentro se mantiene ese aspecto funcional propio de cualquier todoterreno pero como coche del siglo XXI que es lo entremezcla con un fuerte componente tecnológico. Así, el interior del Land Cruiser 2024 propone un cuadro de instrumentos digital sumado a un monitor central de generosas dimensiones pero sin huir de los comandos físicos. Y es que como buen 4×4, es necesario tener botones para activar y desactivar las funciones off road. A ello se suman soluciones inéditas en el modelo como el cargador inalámbrico, el Head-up display o un amplísimo elenco de asistentes a la conducción a lo que añade un generosísimo espacio interior con una configuración hasta de 7 asientos ofreciendo más amplitud gracias al crecimiento de sus dimensiones.
Entramos quizá en el apartado más novedoso de este nuevo Land Cruiser 2024 que no es otro que el motor. Porque además de ofrecer las típicas alternativas diésel y gasolina para mercados como el estadounidense, será en el propio territorio norteamericano donde cuenten con la que es la gran novedad del modelo: el sistema híbrido autorrecargable denominado i-Force Max que combina un bloque de gasolina de 2,4 litros con cuatro cilindros con otro eléctrico para declarar conjuntamente 330 CV y 630 Nm de par.
El mundo al revés porque a Europa, de momento, no llegará dicho propulsor. No obstante, en nuestro mercado sí podría estar disponible con la etiqueta ECO siempre y cuando la DGT no decida cambiar las etiquetas pues se ofrecerá con un bloque diésel de 2,8 litros y cuadro cilindros que suma un sistema de microhibridación de 48 voltios. Declara 204 CV de potencia y lo acompaña de un par máximo de 500 Nm prometiendo unos consumos bastante contenidos. En lo que a dinámica y conducción se refiere, pese al cambio de plataforma y de diseño, el Land Cruiser podrá seguir considerándose como un 4×4 de verdad. Para ello se rodea, entre otros, de un sistema de tracción 4×4 permanente con reductora y bloqueos central y trasero a los que suma varios asistentes electrónicos, los Multi-Terrain Monitor o Multi-Terrain Select, así como novedades significativas como la barra estabilizadora delantera activa o la dirección con asistencia eléctrica. La guinda, una distancia libre al suelo de 22,1 cm, ángulos de ataque, salida y ventral de 30, 22 y 25 grados, respectivamente o los controles Downhill Assist y una función Crawl Control, que actúa como control de crucero de baja velocidad.