Toyota ha presentado una nueva versión de su pick-up Hilux en el Salón del Automóvil de Fráncfort, un show car con el que quiere celebrar el dominio de la marca en el segmento de las pick-ups durante los últimos años 50, cuando comenzó a comercializarse en 1968.
Toyota quiere celebrar con este vehículo el éxito del Hilux, modelo que se comercializa en 180 países de todo el mundo y ha alcanzado más de 18 millones de unidades en sus 50 años de historia.
En este modelo especial, la firma japonesa ha querido reflejar el doble uso que se hace actualmente de este tipo de modelos, como vehículo tanto para el trabajo como para el ocio con la familia o amigos.
Esto lo ha intentado transmitir gracias a elementos estéticos añadidos al modelo como unas barras de protección en caso de vuelco de color negro mate, una protección inferior frontal negra o unas molduras del mismo color en los pasos de rueda.
También viene equipado con unas exclusivas llantas de aleación de 18 pulgadas en negro mate y utilizan unos neumáticos todoterreno BF Goodrich, el mismo fabricante que equipan los Toyota Hilux y Toyota Land Cruiser en el Rally el más duro del mundo: el Dakar.
La zona de carga está protegida por una cobertura plástica e incluye una gran caja de herramientas. Ya en el interior, existen elementos exclusivos como molduras específicas en las puertas, alfombrillas Invincible 50 o el tirador del freno de mano tapizado en piel.