Analizamos la familia de mecánicas del Toyota Auris.
El Toyota Auris es uno de los pocos modelos en donde en una misma familia encontramos las tres variantes mecánicas más demandadas: gasolina, diésel e híbrido. Enfrentamos a las tres opciones en una comparativa en la que buscamos conocer cómo responde cada propulsor, cuáles son sus hábitats naturales y dónde se sienten fuera de lugar.
Ponemos frente a frente a las tres opciones del compacto de Toyota : un gasolina de 1,2 litros y 116 CV, un diésel de 1,4 litros y 90 CV y un híbrido con una combinación mecánica de 136 CV. Esto es lo que nos ha gustado y lo que no.
Toyota Auris: lo que SÍ nos ha gustado
Precio del híbrido: Es uno de los pocos modelos que ofrece opciones diésel, gasolina e híbrida. En nuestro caso, con las mecánicas antes expuestas y acabado Active, encontramos que el coste de los tres modelos se muestra perfectamente escalonado, con la variante de gasolina como la más económica (21.560 €), por debajo del diésel (22.580 €) y el híbrido (23.820 €). Aunque para ser justos con la oferta de Toyota, y ateniéndonos a una gama de potencias similares, la comparación en la versión diésel se tendría que haber realizado con el motor 115 D que dispone de un precio de 23.780 €.
Es aquí donde nos llega una de nuestras sorpresas: la mecánica híbrida no se sube de precio tanto como era de esperar, y se encuentra a la zaga del diésel. De hecho, confrontando los 140H y el 115D apenas les separa un puñado de euros. Aunque aquí hay que hacer la apreciación de no son mecánicas comparables en ningún aspecto pues las necesidades a cubrir y el hábitat de actuación son completamente diferentes.
Maletero igual: La renovación que vivió el modelo el pasado año supuso que, por primera vez en su historia, el maletero de las tres versiones fuera igual, 360 litros. Esto significa que el híbrido, que ha de colocar las baterías eléctricas en algún lugar del piso del maletero y bajo los asientos traseros, no resta cubicaje a su espacio de carga.
Buen nivel de acabados: Fruto del saber hacer japonés, el Toyota Auris dispone de un excelente nivel de acabados, aunque su habitáculo no sea el más divertido ni el más vistoso del segmento. Emplea materiales que saben soportar el paso del tiempo y el uso, por lo que no se espera un desgaste excesivo en elementos como el volante, el pomo del cambio, la tapicería o los botones del salpicadero.
Mecánica: Sí, son tres mecánicas muy diferentes, pero cada una en su hábitat natural resulta excelente. El híbrido en ciudad se comporta como un turismo silencioso y suave, y se recarga por sí mismo en momentos como la frenada. El consumo se reduce a mínimos. El inconveniente lo encontramos al salir a carretera, resulta demasiado lento en algunos cambios de ritmo y sin posibilidad de cambiar de marcha de forma manual al contar con un cambio con variador de par que no muestra marchas reales.
Por su parte, el diésel es un perfecto rutero con gastos inferiores a los 5 litros a los 100 km cuando sale a carretera, aunque para nuestro gusto el habitáculo no está bien insonorizado respecto al ruido del motor, pues se escuchaba en exceso.
Finalmente, el de gasolina se presenta como un vehículo muy compensado en todos los aspectos: buena aceleración, gran velocidad de crucero, consumos contenidos, nervio en la aceleración… y aunque es el que más consume en la media ponderada y el que tiene el precio del carburante más alto, su compra compensa por las ventajas de su precio inicial… y porque la diferencia de consumo no es tan elevada como cabría esperar.
Toyota Auris: lo que NO nos ha gustado
Diseño veterano: Aunque ha experimentado alguna renovación en el último año, es uno de los diseños más veteranos del segmento, y eso resta en atractivo con respecto a una competencia que se ha actualizado en los últimos tiempos con diseños vanguardistas y en los que resaltan su vertiente más deportiva. El Toyota Auris se muestra demasiado sobrio.
Interior parco en detalles: Al igual que sucede con el exterior, el interior tampoco enamora. Muestra su vertiente tecnológica con una pantalla táctil fácil de utilizar y que te indicará el tipo de conducción que uno realiza, pero la sensación es de una presencia excesiva de plásticos, sin apenas alegrías en forma de diseño, cromados, pulidos, cueros o costuras de un color diferente a los tapizados.
Plazas traseras: Aunque el conductor siempre viajará en una posición cómoda, independientemente de su tamaño, no sucederá lo mismo con quienes se sienten detrás. Está hecho para dos personas, tres irán demasiado apretadas, y no dispondrán de demasiado espacio para las rodillas.
Tecnología: Entendemos que el Toyota Auris está preparándose para su nueva generación, pero en el tiempo que dure esta en el mercado, le resultará difícil mantener sus ventas a flote sin elementos como el aviso de salida y mantenimiento de carril (se ofrece en el paquete extra Toyota Safety Sense), entre otras. Sus rivales sobre el papel son el Peugeot 308, el Volkswagen Golf o el Mazda3, y todos ellos se muestran más avanzados tecnológicamente.
Somos conscientes de que la nueva generación se presentará pronto, y cuando podría situarse como el modelo a seguir para sus rivales, pero actualmente se le ve acompasada en el mercado. De hecho, su gran salvoconducto para mantenerse a flote es la presencia de la tecnología híbrida en la gama, la cual representa casi el 70 % de las ventas del modelo.