La unidad de Kitt, ‘El coche fantástico’, que David Hasselhoff poseía ya tiene nuevo dueño. Aunque el precio de venta ha sido muy inferior al esperado por el actor. Si en un principio se barruntaba que podría traspasarlo por alrededor de un millón de dólares, unos 852.000 euros, la puja ganadora en la subasta en la que fue vendido se quedó en 300.000 dólares, algo menos de 250.000 euros.
Cabe decir que esta era una de las unidades de Kitt que se utilizaron en el rodaje de la serie, un Pontiac Firebird TransAm modificado. Una real. Una que aparece en las escenas de acción. Aunque es cierto que cada cierto tiempo aparece una unidad de este vehículo, la verdad es que suelen ser réplicas de aquél que nada tienen que ver con el rodaje de la serie.
Esta unidad de Kitt (Knight Industry Two Thousand) formaba parte de una subasta puesta en marcha por la británica Live Auctioners. Se llamaba ‘The Hoff Auction’ y en esta se podía pujar por diversos objetos pertenecientes al actor y que habían formado parte de las series y películas en las que ha participado el propio actor.
Entre los objetos subastados se encontraban guiones, ropa (entre ellos un bañador rojo de Los vigilantes de la Playa), fotografías de los actores y carteles firmados por el actor y el resto del reparto de las series, prismáticos, objetos personales… y El coche fantástico.
Llama la atención el precio final que ha tenido el vehículo pues, solo unos días después de la puesta en marcha de esta, ya se podía ver una puja cercana al millón de dólares. Y en el tiempo que ha estado en marcha también se han visto pujas superiores al precio final que ha tenido.
Ahora toca comprobar si el propio actor hace la entrega de las llaves del vehículo, tal y como se comprometió cuando se dio a conocer la subasta. Según Hasselhoff, parte de los beneficios obtenidos irán destinados a ONGs con las que colabora.
Ahora ya se pueden encontrar en la calle numerosos vehículos asentados en los primeros niveles de la conducción autónoma, son muchas las marcas que presumen de conectividad de sus vehículos y capacidad de obtener información del coche cuando estamos dentro o lejos de él.
Pero hubo un coche que ya conducía por sí mismo, que tenía personalidad propia y con el que te podías comunicar no desde un teléfono móvil sino desde un reloj inteligente. Cierto es que se trataba de ciencia ficción, pero es una ruta que muchos fabricantes están siguiendo en el desarrollo de sus vehículos del futuro.
La serie fue creada por Glen A. Larson y estrenada en 1982 por Universal. Aquí un jovencito Michael Knight (David Hasselhoff) defendía a pobres y desamparados contra la injusticia armado de mucha valentía y un prototipo de coche inteligente. Este se llamaba Kitt y se comunicaba con su entorno gracias a una centralita central inteligente que le daba la capacidad de hablar.
El coche fantástico duró cuatro años, supuso el lanzamiento de Hasselhoff al estrellato y tuvo varias secuelas, reediciones e incluso alguna película homenaje. Con el tiempo se ha convertido en una serie de culto que se suele reponer en televisión cada cierto tiempo. Y no son pocos los que han querido recrear el vehículo. No siempre con demasiado éxito.