Jaguar es una de las primeras marcas que se ha adelantado a las futuras exigencias de seguridad de los coches eléctricos. La marca británica ha presentando un nuevo sistema de sonido de aviso para su I-PACE, que alertará a los peatones de la presencia del vehículo en la calzada (a una velocidad inferior a 20 km/h).
Aunque no se ha detallado una fecha de salida al mercado, se espera que el sistema esté integrado en los nuevos Jaguar I-PACE antes de julio de 2019. En ese mes entrará en vigor la normativa europea que obliga a todos los coches híbridos y eléctricos nuevos a llevar incorporado sonidos de aviso de presencia a bajas velocidades.
El coche eléctrico contribuye a la eliminación de la contaminación acústica de las ciudades. Pero el silencio de sus motores hace aumentar al mismo tiempo el riesgo de atropellos a peatones y ciclistas. Para ello se ha creado este sonido, bautizado como Audible Vehicle Alert System (AVAS).
El AVAS consiste en un zumbido similar al de un motor convencional, emitido desde un altavoz instalado detrás de la parrilla delantera. Se activa cuando el coche se mueve de 0 a 20 km/h o marcha atrás. El conductor o los pasajeros no pueden desconectar el ruido, por razones de seguridad, y supera los 56 db, el mínimo exigido por la nueva legislación europea.
Sobrepasando los 20 km/h, este sonido artificial no funciona, ya que, según Jaguar, a esa velocidad “hay suficientes ruidos aerodinámicos y de rodadura para alertar a los peatones”. Desde dentro del coche el sonido no se escucha, mientras que desde fuera irá aumentando el tono según se acelere.
La tecnología, simple pero efectiva, ha sido sin embargo fruto de un trabajo de cuatro años de los ingenieros de Jaguar. En las pruebas del sonido han participado miembros de la asociación de Perros Guía para personas con discapacidad visual del Reino Unido. De esta manera, han acabado desarrollando un sonido del coche audible, pero al mismo tiempo discreto.
La inclusión de este sistema de alerta sonora en el Jaguar I-PACE coincide prácticamente con el aniversario de la presentación del modelo, el primero completamente eléctrico del constructor británico. Se compone de dos motores alimentados por una batería de ion-litio de 90 kWh, chasis de aluminio y una carrocería SUV que alberga cinco plazas. La autonomía del modelo llega a alcanzar los 470 km en el ciclo WLTP.