El Skoda Octavia llega con motores gasolina, diésel, microhíbridos e híbridos enchufables.
El Skoda Octavia se presentará el próximo 11 de noviembre aunque la firma checa ya nos ha adelantado unas primeras imágenes del modelo, aunque viniladas. Eso sí, ha aprovechado la ocasión para desgranar toda su tecnología. El objetivo es seguir siendo el modelo de referencia entre las berlinas y, de cumplir con las expectativas creadas, lo conseguirá (solo queda confirmar que mantenga la tendencia de precios de sus modelos) pues la disposición de mecánicas y sistemas de seguridad será envidiable.
Sorpresa para muchos, se presentará con su carrocería familiar (Skoda Octavia Combi) pues representa en torno al 65 % de las ventas, para ver el perfil sedán habrá que esperar algo más, y llegará con mecánicas de gasolina, diésel, híbridas enchufables y microhíbridas.
Aterrizará en el mercado en las próximas semanas y dejará para el 2020 las variantes Skoda Octavia Scout, la más campera, y Skoda Octavia RS, la más deportiva.
Cabe recordar que el Skoda Octavia es la berlina más vendida en Europa y ha sido capaz de posicionarse como el coche más vendido en Chequia, Austria, Suiza, Finlandia, Hungría, Polonia, Serbia y Bielorrusia.
Esta denominación se utilizó por primera vez en 1959 y, desde entonces, ha vendido más de 6,5 millones de unidades del modelo. Solo de la última generación ya matricularon más de 400.000 unidades.
Crece en todos los sentidos
El modelo aumenta su tamaño, su disposición tecnológica y hasta en la presencia de soluciones inteligentes propias de la corriente Simply Clever de Skoda. El nuevo Skoda Octavia establece su longitud en los 4.689 mm tanto en las variantes sedán como en la Combi, y la anchura se amplía en ambos casos hasta los 1.829 mm.
En cuanto al maletero, el espacio de carga se establece en los 600 litros en el caso del sedán y en los 640 l en el del Skoda Octavia Combi.
Las imágenes facilitadas poco dejan ver del nuevo físico del Skoda Octavia aunque el fabricante checo ya avisa que contará con una calandra con un mayor protagonismo y unos grupos ópticos más finos y alargados. Estos contendrán luces led y quedarán en opción las de tipo Matrix full LED. En la trasera sucederá lo mismo.
La zaga se verá influida por los últimos lanzamientos de la compañía mientras que las ópticas contarán con tecnología led quedando en opción los full led con intermitentes dinámicos.
En cuanto a las llantas, las habrá de hasta 19 pulgadas; y en cuanto al chasis se ofrecerán dos opciones adicionales a la convencional. Por un lado la suspensión deportiva rebajará en 15 mm su distancia al suelo, mientras que la Rough Road se separa otros 15 mm.
Y esto sin olvidar la presencia del Control Dinámico de Chasis que también regulará la dureza de las suspensiones para adaptarlo al terreno que se pisa.
Nuevo interior, mayores calidades
El habitáculo también se impregnará de la revolución del modelo. Así, el nuevo volante multifunción ahora solo contará con dos radios, mientras que el Digital Cockpit crece hasta las 10 pulgadas.
El panel será nuevo y muchos de los botones desaparecerán para incluirse en el nuevo sistema de infoentretenimiento desplegado en el centro del salpicadero que puede ser de hasta 10 pulgadas.
En este se incluyen nuevos servicios de infoentretenimiento como el streaming con radio y televisión o la sincronización con los teléfonos móviles sin la conexión de cables. A esto añade un nuevo head-up display que proyectará información sobre la luna delantera.
En el listado de disponibles quedan los asientos que mejoran la ergonomía, y que ofrece masaje, refrigeración y calefacción, mismo listado en el que se pueden encontrar asientos deportivos con tapicería ThermoFlux. Entre el equipamiento opcional también se podrá encontrar el climatizador trizona.
Opciones mecánicas de todos los gustos
La berlina checa llegará con tres motores de gasolina, un 1.0 TSI de 110 CV, un 1.5 TSI de 150 CV y un 2.0 TSI de 190 CV. Los dos primeros pueden ser microhibridados, lo que significa que pueden ir unidos a un motor de arranque de 48 V y una batería de 48 V lo que les permitirá un ahorro en los apartados de consumos y emisiones, y que le dotará de la etiqueta ECO.
En ambos casos pueden ir unidos a una caja automática DSG de 7 relaciones y conexión electrónica, o mediante una caja manual de 6 relaciones. Por su parte, el de 190 CV irá unido de forma invariable a una tracción total y a un cambio automático DSG de 7 relaciones.
En cuanto a los diésel, se podrán encontrar un 2.0 TDI con tres niveles de potencia: 115, 150 y 200 CV, que opcionalmente pueden ir unidos a cambios manuales o automáticos así como a la tracción total (los dos últimos escalones de potencia). Estos cuentan con dos catalizadores donde el AdBlue reduce en un 80 % las emisiones de gases contaminantes.
La cuarta generación del Skoda Octavia volverá a ofrecer una opción de GNC con su motor 1.5 TGI de 130 CV y debutan las mecánicas híbridas enchufables con dos niveles de potencia: 204 y 245 CV, aunque no se ha rebelado la autonomía que tendrán estos en modo eléctrico ni el tiempo de carga que requieren.
Referencia en seguridad
El último apartado, uno de los que le han convertido en la berlina líder, le situará como uno de los más seguros de nuestras calles. Así, entre las novedades encontramos el Asistente de Prevención de Colisión que detecta un posible impacto con un peatón, ciclista u otro coche y que actúa sobre el volante, girando y cambiando de carril, siempre en condiciones de seguridad para evitar el impacto.
También cuenta con Alerta de Salida, que avisará de la presencia de otro vehículo cuando se vaya a abrir una puerta, mientras que el Hands-on Detect comprobará si el conductor sujeta de forma correcta el volante y detectará si ha sufrido algún problema médico. Si, finalmente, tuviera algún problema de salud, el Asistente de Emergencia podría detener el vehículo por completo.
