El Skoda Karoq llega a la categoría de los SUV medios con un objetivo claro: seguir con el éxito que le marca su hermano mayor, el Skoda Kodiaq.
Texto: Karam el Shenawy
Nadie duda, a estas alturas, de que los SUV son el segmento de moda. No importa en el segmento en el que nos encontremos, que si un fabricante decide omitir dicha categoría, a buen seguro sus ventas caerán en el olvido. Una circunstancia que Skoda quiere evitar a toda costa. Porque mucho ha tenido que trabajar el fabricante checo para llegar donde está y conseguir la confianza de un público que la seguía viendo como una marca minoritaria y, en algunos casos, pobretona.
Un trabajo que ha costado lo suyo y que se ha sostenido por un lado en la mejora de sus productos más representativos, Skoda Fabia, Skoda Octavia y Skoda Superb, y por otro, con la llegada de nuevos modelos que se han encargado de sumar valor añadido. Aquí es donde entran los nuevos SUV comandados por el Skoda Kodiaq (un auténtico superventas a nivel mundial) y secundados actualmente por el Skoda Karoq, protagonista de estaprimera prueba.
Skoda Karoq: adiós Yeti
Un vehículo que llega en un momento dulce para el segmento de los C-SUV. Con el Nissan Qashqai dominando con mano de hierro, la marca ha decidido dar un paso al frente presentando el que es el heredero natural del Skoda Yeti. Sí, Skoda jubila al señor de las nieves, al sherpa que exploró los terrenos embarrados de los todocaminos y que tan buen resultado le ha dado en los ocho años que ha estado vigente.
Pero los tiempos cambian, y pese al buen éxito logrado, era tiempo de ofrecer un producto nuevo, o al menos con la previsión de tener un mayor tirón de ventas. Así es como ha nacido el Skoda Karoq, fruto de la afamada plataforma modular MQB que ya da vida a los Volkswagen Tiguan y SEAT Ateca, primos hermanos con los que el checo comparte buena parte de su estructura.
No en vano, si uno tapase todos los logos de no ser por los elementos diferenciadores como la parrilla, la doble luz delantera (heredada del Skoda Kodiaq) o los grupos ópticos traseros, ambos, no sería complicado caer en la confusión asegurando que está viendo al modelo español. Si hasta miden (casi) lo mismo, pues el Skoda Karoq ofrece una carrocería de 4,38 metros de largo (20 mm más), cota que acompaña de una anchura de 1,84 y una altura de 1,60 metros.
En plena era digital, el Skoda Karoq no quería quedarse atrás y se convierte en el primer Skoda de la historia en montar un cuadro de instrumentos digital de 12,3 pulgadas que sustituye a los tradicionales relojes. Es totalmente configurable ofreciendo hasta cuatro ambientes diferentes (el más llamativo es sin duda en el que el mapa cubre toda la superficie). Por lo demás, la calidad y ajuste de acabados del nuevo SUV checo roza el notable alto, con un buen tacto de los materiales y una terminación de alto standing.
Si nos centramos en el espacio, los 2,64 metros de batalla (idéntica a la del SEAT Ateca) le reporta una segunda fila amplia y muy cómoda. Destaca el montaje de tres asientos individuales gracias al sistema Varioflex heredado del Skoda Yeti y que acabará por enterrar a los monovolúmenes, cada uno con espacio de sobra para albergar a un adulto (aunque la central es más recomendable para personas menudas) y, sobre todo, con la posibilidad de desplazarse longitudinalmente. Con mis 1,79 metros de estatura, el espacio reinante tanto para la cabeza como para las piernas es sobresaliente. La anchura a la altura de los hombros también es buena mientras que el techo queda aún a varios centímetros de mi coronilla.
Pero además, con la comentada función VarioFlex podremos no solo correr la segunda fila, sino plegarla, replegarla e incluso extraerla por completo de forma sencilla. En este caso, el volumen de cargar variará entre los 479 y los 508 litros en función de dónde estén situadas, y de los 1.605 litros con todas plegadas o de los 1.810 con todas extraídas. En definitiva, un auténtico baúl con ruedas.
En el apartado mecánico, el Skoda Karoq estará disponible con cuatro propulsores, todos turboalimentados, repartidos equitativamente entre gasolina y diésel. La primera dupla comienza por el tricilíndrico 1.0 TSI de 115 CV que declara un consumo medio de 5,2 l/100 km, y sigue por el nuevo 1.5 TSI de 150 CV con sistema de desconexión de cilindros, que logra rebajar el gasto hasta los 5,1 l/100 km. Ambos se combinan con la transmisión manual de seis relaciones, aunque en opción tienen disponibles la automática de doble embrague DSG, con siete.
El dúo diésel, por su parte, está comandado por el 1.6 TDI con 115 CV y 4,5 l/100 km de consumo, al que sigue el archiconocido y exitoso 2.0 TDI de 150 CV y 4,4 litros. Aquí, de nuevo, las cajas asociadas serán las dos disponibles. Más adelante, se prevé la llegada del bloque más potente de todos, el 2.0 TDI de 190 CV, combinado en exclusiva a la transmisión DSG y a la tracción total.
En efecto, como buen heredero del Skoda Yeti, el Skoda Karoq no dejará de lado a la tracción integral. Pese a que la demanda de este tipo de versiones no es todo lo fuerte que se podría esperar, el todocamino checo vuelve a echar mano del embrague Haldex de quinta generación para reportar un extra de seguridad en situaciones de baja adherencia o si queremos sacarle al campo.
Cierto es que la ruta no fue especialmente complicada, pero dio lugar para recordar las bondades de este sistema de tracción (que solo puede combinarse, de momento, con el motor 2.0 TDI), y del modo de conducción Off-road, donde el sistema de tracción permite un mayor deslizamiento de las ruedas, mientras que el bloqueo del diferencial electrónico (EDL) reacciona de forma más rápida. A todo ello hay que sumar un control de descenso de pendientes efectivo que nos permitirá olvidarnos de todo lo relacionado con la parte mecánica.
De vuelta al asfalto, el Skoda Karoq sorprende por su comportamiento. En vías rápidas, el aplomo y el confort priman, pudiendo realizar cientos de kilómetros sin llegar a fatigarnos. Pero al sacarlo a una carretera virada (como las que dominaban la isla mediterránea) se muestra como un coche muy aplomado.
El chasis está bien ajustado y la carrocería apenas emite balanceos. En este sentido, hay que destacar el buen trabajo ejercido por las suspensiones, sobre todo si montamos el tren adaptativo DCC que regula la dureza de los amortiguadores a través de tres modos: Confort, Standard y Sport. Para redondear el conjunto, la dirección transmite la información deseada mientras que los frenos son contundentes, sin llegar a dar síntomas de fatiga.
Desde su llegada al mercado, prevista para el mes de diciembre, estará disponible en dos acabados, Ambition y Style, desde el más básico estará disponible con un amplio listado de elementos: luces LED de día y en la zaga, llantas de aleación de 17 pulgadas, freno de mano eléctrico, climatizador automático, sistema multimedia Bolero con pantalla de 8,0 pulgadas, 7 airbags, control de velocidad de crucero con limitador, sensores de aparcamiento traseros con cámara de marcha atrás, faros Full LED, el asistente de frenada de emergencia automática en ciudad con detección de peatones… Todo ello por un precio que parte de los 24.210 € para el gasolina 1.0 TSI y de los 26.210 € para el 1.6 TDI.
Por encima, el acabado Style añade llantas de 18”, sistema multimedia Amundsen con pantalla de 8,0 pulgadas y navegador, sensores de aparcamiento delanteros, acceso y arranque sin llave, apertura y cierre eléctricos del portón con función manos libres…
En el listado de opciones, aparecen los múltiples sistemas de seguridad que están disponibles en el modelo, tales como el control de velocidad de adaptativo, la alerta por tráfico cruzado trasero, el asistente de aparcamiento, el detector de fatiga, reconocimiento de señales de tráfico, el sistema activo de alerta por cambio involuntario de carril, el asistente de atascos o de luz de carretera, el sistema anticolisiones múltiples… De esta forma, el Karoq se convierte, con 19 asistentes, en uno de los Skoda más seguros de la historia y una apuesta segura y muy razonable para un segmento al alza.
Como parte del lanzamiento comercial y como ya hiciera con el Kodiaq, Skoda tiene previsto realizar una caravana a lo largo de toda la geografía española para mostrar el Karoq a los conductores, quienes además podrán realizar una prueba de conducción. La idea es superar las 5.000 pruebas dinámicas realizadas con su hermano mayor, y van por buen camino, pues se han reservado 4.100 ya. Para más información, la marca dispone del sitio web www.karavanaq.es donde los usuarios podrán conocer las fechas y las ciudades por las que pasará la comitiva.