Tras llevar a cabo un proyecto de investigación y desarrollo, Signus ha conseguido convertir el polvo de caucho procedente del reciclaje de los neumáticos al final de su vida en un componente clave para fabricar pastillas de freno para vehículos ligeros.
Como parte de su compromiso con la sostenibilidad y los principios de la economía circular, la entidad Signus (Sistema Integrado de Gestión de Neumáticos Usados), en colaboración con el Instituto de Cerámica y Vidrio del CSIC, puso en marcha en 2019 un proyecto de investigación y desarrollo para ampliar las aplicaciones de los neumáticos reciclados, concretamente el uso de polvo de caucho procedente de neumáticos como componente de pastillas de freno para vehículos ligeros.
El estudio, denominado Braketyre, sirvió para evaluar la viabilidad técnica de este material reciclado como como materia prima secundaria destinada a la fabricación de compuestos empleados en la fabricación de pastillas de freno para vehículos ligeros. El objetivo es aprovechar al máximo los componentes reciclados a partir de neumáticos usados para que la industria del automóvil reduzca su dependencia de las materias primas de origen natural y utilice en su lugar otras más sostenibles. En este caso, la investigación permite prescindir del polímero virgen que se solía utilizar habitualmente en la fabricación de pastillas de freno y cambiarlo por polvo de caucho reciclado procedente de neumáticos al final de su vida.
Para determinar si esta materia se puede utilizar para dar forma a las pastillas de freno, Signus ha tenido en cuenta una serie de requisitos imprescindibles para garantizar la seguridad de cualquier tipo de vehículo, puesto que para detenerse de forma rápida y fiable en todas las condiciones depende de las pastillas de freno. Entre los requisitos figura la resistencia al desgaste, la deceleración estable durante el frenado, la eliminación del ruido producido y la ausencia de vibraciones a cualquier temperatura y en todo tipo de superficies y condiciones, ya sea agua, barro, humedad o seco.
Totalmente viable
La conclusión es que el empleo de partículas de caucho procedente del neumático usado para la fabricación de pastillas de vehículos ligeros es conveniente técnicamente, siempre y cuando el tamaño de las mismas sea inferior a 1 mm y se mezclen con otros materiales de origen polimérico, metálico e incluso material, dando lugar a un componente compuesto con altas prestaciones elásticas y de durabilidad.
Gracias a ello, la elaboración de este componente del sistema de frenado se convierte en un proceso sostenible porque reduce la dependencia de los recursos naturales, de hecho, el porcentaje de caucho reciclado de neumático en pastillas de freno puede llegar a suponer hasta el 10% del peso de las mismas. De esta forma, Signus Ecovalor ha encontrado otra aplicación para transformar en productos útiles los neumáticos fuera de uso, contribuir al desarrollo de la economía circular y garantizar el futuro del reciclado.