Europa pretende imponer un seguro obligatorio a las bicis eléctricas como el de los coches

El próximo 22 de enero está prevista la votación en el Parlamento Europeo de una propuesta de la Comisión que pretende imponer el seguro obligatorio para todas las bicis eléctricas en uso en los estados miembros de la UE. Se trata de una medida controvertida contra la que se ha rebelado buena parte de la industria ciclista.

La propuesta, que pretende incluirse dentro de una nueva actualización de la directiva sobre seguros de vehículos a motor, incluye ahora a las e-bikes al mismo nivel que coches o motos. Sus usuarios deberán así contratar un seguro a terceros, bajo las mismas condiciones que otro vehículo a motor.

Norma vinculante

La directiva europea sobre seguros incluirá a las bicis eléctricas con las mismas obligaciones que los vehículos de motor.

Para la votación se han introducido varias enmiendas a la nueva directiva por parte de diferentes asociaciones de ciclistas. La Federación Europea de Ciclistas (ECF) la califica de “sinsentido” y para ellos supondrá su fin como alternativa al coche.

“La nueva norma supondrá que los ciclistas deberán registrar su bicicleta, tener una matrícula y pagar una cuota cada año por el seguro”, explica Ceri Woolsgrove, uno de los responsables de la ECF, en declaraciones a el eldiario.es. De salir adelante, la medida deberá ser adoptada por los diferentes estados miembros, como cualquier otra directiva europea. No obstante, estos últimos pueden introducir modificaciones para adaptarla a la legislación nacional.

Críticas a la medida

La potencia máxima del motor de una e-bike homologada no debe ser superior a 250 W.

Además de la ECF, las marcas del sector y los usuarios consideran la nueva norma injusta. Consideran que las bicis eléctricas homologadas cuentan con limitador de velocidad a 25 km/h y el motor sólo se activa cuando se pedalea. “Tengo mis dudas sobre la obligatoriedad de contratar un seguro como el de un ciclomotor para un vehículo limitado en potencia y velocidad”, valoró Juan Ochoa, propietario de Bicimanía, en declaraciones a CMDSport.

Precisamente, esa limitación es la que hacía escapar a la bici eléctrica de su calificación como vehículo a motor. Ahora, con esta modificación, señalan desde los colectivos ciclistas, no tiene mucho sentido esta limitación del motor. Tampoco su uso como alternativa, sobre todo en el plano económico, al coche o a la moto tradicional.

¿Fin del auge e-bike?

Las bicicletas eléctricas se han erigido como una alternativa económica de movilidad a los coches y motos.

Asimismo, desde la Federación Europea de Ciclistas alertan que la normativa puede hacer caer las ventas de eléctricas. En España, por ejemplo, es el tipo de bicicleta que más ha aumentado sus ventas en el último ejercicio (2017), con un incremento del 21,1% con respecto a 2016, según datos de la Asociación de Marcas y Bicicletas de España.

Entrada Relacionada