Doble noticia la dada por SEAT. Por un lado, se confirma la llegada de un tercer “SUV” a la gama a finales de 2018, que podría jubilar definitivamente al Alhambra. Por otro, la fabricación de este nuevo modelo se llevará a cabo en Wolfsburgo, planta del Grupo Volkswagen que, por primera vez, recibe un vehículo de la marca española.
Este destino resulta sorprendente, pues el que tenía más papeletas era, priori, el nuevo centro de Audi en México. De allí sale el Q5 2017, que, al igual que el nuevo SEAT, emplea la plataforma modular “MQB” para motores en posición longitudinal. Haber fabricado allí ambos hubiese garantizado un importante ahorro de costes.
Lo que podemos adelantar de este gran todocamino es que la gama dispondrá de versiones de 5 y 7 plazas. En cuanto a la línea estética, el prototipo 20V20, exhibido en el Salón de Ginebra de 2015, podría servir de inspiración en algunos puntos. La producción del modelo comenzará a mediados de 2018.
Esta novedad confluye en el tiempo con la petición, por parte de la planta de Martorell, de recibir parte de la producción del Ateca. Los sindicatos solicitan entre 25.000 y 30.000 unidades al año. Recuerda que, actualmente, el todocamino español se produce junto al Kodiaq, en la planta que Skoda tiene en Kvasiny, República Checa.
Según se explica desde “El Mundo”, el Ateca podría compartir línea de producción con el León y tan solo habría que realizar una inversión no muy costosa en pintura. Veremos qué deciden próximamente en el seno del Grupo Volkswagen sobre esta posibilidad.
Resumiendo sus planes de futuro, la planta catalana se encargará de los nuevos Ibiza y Arona el año que viene. En 2018, perderá el Audi Q3, aunque se incorporará el A1. Todos estos pequeños modelos necesitan menos horas de trabajo que otros de mayor tamaño, de ahí la solicitud de parte de la producción del Ateca.
Cabe destacar en este punto que la planta navarra de Volkswagen albergará la producción del nuevo Polo en 2017 y la de un inédito “SUV” urbano de la marca alemana en 2018.