Presentado en el salón de Fráncfort, el SEAT León Cross Sport demuestra que se pueden fusionar altas prestaciones y versatilidad campera en un compacto. El prototipo, que está basado en las versiones CUPRA y X-PERIENCE del León, lleva un motor de gasolina turboalimentado 2.0 TSI de 300 CV y, a su vez, una carrocería elevada 4,10 centímetros. La buena capacidad “off road” queda manifiesta con la tracción total mediante un embrague Haldex.
Con llantas de 19 pulgadas y pintado en color “Naranja Ultra”, como el ejercicio de estilo 20V20, incluye protecciones por todo el perímetro inferior de la carrocería de tres puertas y un interior muy deportivo, con asientos con reposacabezas integrados, volante con marca de las doce en punto e inserciones del color exterior. El cambio es el automatizado de doble embrague “DSG”, que, sumado al potente propulsor, hace posible una destacada aceleración de 0 a 100 km/h en 4,9 segundos.
El Cross Sport lleva el sistema de conectividad “Full Link” que permite conectar teléfonos móviles con los sistemas operativos Apple iOs y Android y manejar las aplicaciones de estos desde la pantalla del salpicadero. También hay tecnologías de asistencia a la conducción, como control de velocidad de crucero adaptativo, sistema de reconocimiento de señales de tráfico y alerta por cambio involuntario de carril.
Este prototipo de SEAT se suma al 20V20 Concept, que adelantó este año en el salón de Ginebra el futuro todocamino de la marca española. De 4,65 metros de longitud, dimensión cercana a la de un Audi Q5, su atlética carrocería resulta llamativa y el interior es más lujoso que el de los actuales modelos de producción. Lleva tracción total y el maletero alcanza los 600 litros.
Ojalá que esta ofensiva en prototipos “SUV” de la firma de Martorell se convierta en modelos de producción en los próximos años.