SEAT ha creado un servicio denominado Fast Lane que supone una reducción en el periodo de entrega de sus vehículos de entre dos y tres semanas, cuando la media está en unos 90 días. De esta manera, el configurador online permite realizar buscar la opción que más te interese, aunque presenta una serie de acabados ya precargados, los más solicitados; de manera que todo el proceso de compra resulta mucho más rápido y cómodo.
A partir de aquí sólo quedaría acudir al concesionario para formalizar la venta con la firma de la documentación y esperar a la llegada del vehículo. Este nuevo formato se encuentra dentro de la estrategia de la compañía Order to Delivery 4.0, que ya se puso en marcha en Austria a principios de año y mediante la que gestionó la entrega de 300 vehículos. Ahora llega a Alemania (disponible para el SEAT Ibiza y el SEAT León) y España (con el León).
Este procedimiento sirve a la marca española para investigar nuevos procedimientos logísticos y conocer mejor a sus futuros clientes, pues se tienen en cuenta las opciones que el comprador desea antes de formalizar su compra. Wayne Griffiths, vicepresidente Comercial de la compañía, destaca que “SEAT busca nuevas soluciones para hacer del tiempo de entrega al cliente una ventaja competitiva para la marca. Fast Lane es la respuesta al cambio en una sociedad en la que el plazo de entrega es ya un factor clave en la decisión de compra”.
Por su parte, Andreas Tostmann, vicepresidente de producción de SEAT, señaló que “la iniciativa nos permitirá investigar nuevas soluciones logísticas y con las experiencias adquiridas podremos continuar con la comercialización de Fast Lane en otros mercados, con la vista puesta ahora en Alemania. Mediante el empleo de sistemas de pedido predictivos, la producción eficiente y el transporte anticipado, la flexibilidad del proceso Fast Lane de SEAT establece un nuevo estándar mundial en la entrega de coches”.