Aprovechando la temporada invernal, son muchos los fabricantes que nos invitan a probar sus sistemas de tracción total, como el SEAT 4Drive. Para ello nos desplazamos hasta la región del Tirol, en Austria. Carreteras reviradas con baja adherencia, rutas offroad sobre nieve, ejercicios de handling sobre hielo… vamos, un escenario inmejorable para “hacer manos” y, de paso, comprobar las bondades de esta tecnología.
Este tipo de eventos son una gran oportunidad para demostrar de lo que son capaces los 4×4 actuales, coches que cada vez cuentan con más adeptos. De hecho, en los últimos 25 años la demanda de vehículos de tracción integral ha ido creciendo de manera exponencial. Si en 1990 solo conseguían una cuota de mercado del 2,7 por ciento, en 2016 ese porcentaje llegaba al 13.
La gama SEAT 4Drive
En el caso de la marca española, hay cuatro modelos que actualmente ofrecen la tracción total SEAT 4Drive. Hablamos, por un lado, del SEAT León ST CUPRA 300, la variante familiar deportiva de su compacto, y del SEAT León ST X-Perience, la versión más campera, también con carrocería wagon.
Junto a ellos aparecen en el catálogo su primer todocamino, el SEAT Ateca, además de todo un veterano en la firma de Martorell, el SEAT Alhambra 4Drive. Anteriormente, cabe recordar, hubo otros SEAT con tracción total. Por ejemplo, en el año 2000 apareció el León 4, después vino el citado monovolumen y más adelante, el Altea Freetrack.
Los modelos actuales adoptan la quinta generación del sistema SEAT 4Drive. Este dispositivo ahorra hasta 1,5 kilos de peso respecto a versiones anteriores. Se compone de un embrague multidisco Haldex con accionamiento hidráulico y control electrónico. Para favorecer un óptimo reparto de pesos, está ubicado en el eje trasero, entre el árbol de transmisión y el diferencial posterior.
¿Cómo trabaja el SEAT 4Drive?
En condiciones normales, cualquier coche de SEAT con este sistema funciona como si fuese un tracción delantera. Y es así para incidir lo mínimo posible en el consumo, evitando el arrastre innecesario de las cuatro ruedas. Ahora bien, la tracción total se conecta automáticamente al detectar que los neumáticos delanteros patinan. El conductor no lo percibe, ya que se produce en milisegundos.
Más cosas que debes conocer del SEAT 4Drive: dependiendo de las condiciones de conducción, puede haber un reparto de la tracción de hasta el 50 por ciento en cada eje. De necesitarlo, en situaciones de máxima exigencia, hasta el 100 por cien de la fuerza se puede derivar al eje posterior. De igual forma, y ante la ausencia de un bloqueo de tipo mecánico, el control electrónico del diferencial EDS se ocupa de frenar la rueda que deslice, trasladando el par al otro lado.
Las pruebas con los SEAT 4Drive
Una vez conocida la teoría, comenzamos los ejercicios con distintos coches de la marca española. Arrancamos con el SEAT León ST X-Perience, propulsado en nuestra unidad con el motor turbo de gasolina 1.8 TSI de 180 CV y cambio DSG de siete marchas.
Tras un pequeño tramo de conducción por carreteras bastante frías y con agua, nos adentramos en un terreno bastante más complicado y con muchas trampas. Pistas con nieve, a veces compactada, y otras escondiendo muchos agujeros que pusieron a prueba la tracción total de SEAT.
El León ST X-Perience no trae programas específicos para campo. Sin embargo, su altura elevada respecto al resto de la gama permiten afrontar terrenos más abruptos. Para ello, también conviene activar el modo ESC Sport, que deja más permisiva la electrónica. Igualmente, montaban los indispensables neumáticos de invierno M+S.
Salvo algunos coches de la ruta que se quedaron enganchados en profundas roderas de nieve, la verdad es que, sin ser un especialista en la materia, el coche supero con mucha dignidad los obstáculos planteados.
El siguiente examen fue un poco más allá. Con el SEAT Ateca 4Drive 2.0 TSi de 190 CV probamos el control de descenso en una rampa con cierto desnivel y superficie poco adherente. Basta con seleccionar el modo de conducción offroad, que a su vez activa por defecto el asistente de descenso de pendientes.
El coche avanza por sí solo sin intervención alguna del conductor. Este puede modular la velocidad pisando suavemente el acelerador, entre 3 y 30 km/h. Además, el Ateca también incorpora el programa snow, que le permite avanzar con mayor eficacia sobre nieve.
El plato fuerte quedó para el final. Con la tutela del piloto español Jordi Gené, embajador de la marca, nos subimos al SEAT León ST CUPRA de 300 CV. Aquí se trataba de “hacer manos” en un ejercicio de conducción sobre hielo y nieve. Primero lo realizamos con neumáticos con clavos y con los controles electrónicos desconectados (se apagan manteniendo pulsada durante cinco segundos la tecla correspondiente).
Lo más difícil era llegar al punto en el que el coche perdía la tracción y la trasera se cruzaba lo suficiente como para mantener el derrape durante toda la vuelta al trazado marcado. Un circuito básico pero engañoso, ya que había distinta adherencia en cada zona.
Después, con neumáticos de invierno, había que ser más finos con el gas y más dulces en los movimientos del volante. No obstante, en este tipo de condiciones quedó manifiesta la gran ayuda de la tracción total de SEAT; un elemento que siempre recomendamos a los amantes de los deportes de invierno que se mueven por superficies delicadas o que simplemente quieren tener un plus de seguridad en sus desplazamientos cotidianos.
A continuación, os dejamos el vídeo con el SEAT León CUPRA 4Drive sobre hielo, un ejemplo muy divertido sobre las posibilidades que nos brinda esta tecnología.
Prueba SEAT León ST Cupra 300 4Drive: ficha técnica
Motor térmico | Gasolina, 4 cilindros en línea, turboalimentado |
Cilindrada | 1.984 cc |
Potencia | 300 CV a 5.500-6.200 rpm |
Par | 380 Nm a 1.800-5.500 rpm |
Velocidad máxima | 250 km/h |
Aceleración | 4,9 s (0 a 100 km/h) |
Consumo | 7,2 l/100 km (mixto) |
Medidas (L/An/Al) | 4.548 / 1.816/ 1.431 mm |
Neumáticos | 225 / 40 R18 |
Peso en vacío | 1.545 kg |
Maletero | 587 l |
Precio base | 39.350 euros |
Prueba SEAT León X-Perience 1.8 TSI 180 CV 4Drive: ficha técnica
Motor térmico | Gasolina, 4 cilindros en línea, turboalimentado |
Cilindrada | 1.798 cc |
Potencia | 180 CV a 4.500-6.200 rpm |
Par | 280 Nm a 1.350-4.500 rpm |
Velocidad máxima | 221 km/h |
Aceleración | 7,1 s (0 a 100 km/h) |
Consumo | 6,5 l/100 km (mixto) |
Medidas (L/An/Al) | 4.543 / 1.816/ 1.481 mm |
Neumáticos | 205 / 55 R17 – 225 / 45 R19 |
Peso en vacío | 1.486 kg |
Maletero | 587 l |
Precio base | 32.820 euros |
Prueba SEAT Ateca 2.0 TSI 190 CV 4Drive DSG: ficha técnica
Motor térmico | Gasolina, 4 cilindros en línea, turboalimentado |
Cilindrada | 1.984 cc |
Potencia | 190 CV a 4.200-6.000 rpm |
Par | 320 Nm a 1.450-4.200 rpm |
Velocidad máxima | 212 km/h |
Aceleración | 7,9 s (0 a 100 km/h) |
Consumo | 7 l/100 km (mixto) |
Medidas (L/An/Al) | 4.363 / 1.841/ 1.611 mm |
Neumáticos | 225 / 55 R17 – 225 / 45 R19 |
Peso en vacío | 1.536 kg |
Maletero | 485 l |
Precio base | 35.460 euros |