Ya lo dijo Pere Navarro al volver a tomar el control de la Dirección General de Tráfico: el carnet por puntos hay que revisarlo. Y parece que tiene decidido por dónde va a comenzar esta actualización. Usar el teléfono móvil mientras se conduce podría aumentar la resta de puntos del carnet, pasando la sanción de 3 a 4 o 6 de penalización. Sobre la cuestión económica no se ha dicho nada.
Esto es lo que se desprende de una entrevista concedida a la Cadena SER en la que señaló que desde 2016, las distracciones al volante son la primera causa de mortalidad al volante; y buena parte de esta pérdida de atención la encontramos en el uso del móvil. Admite que no es un problema solo de nuestro país, pues también preocupa en los de nuestro entorno. Pero señala que hay que atajarlo a la mayor brevedad posible. Un consejo: no dejes de revisar nuestra guía para evitar las distracciones al volante.
Tampoco convence al director de la DGT el uso de estos dispositivos que permiten hablar por teléfono sin separar las manos del volante. El problema, según entiende Pere Navarro, está en el modo en el que el conductor deja de atender a cuanto sucede en la carretera para centrarse en la conversación.
Ante esto confía en que los fabricantes de móviles añadan una opción “modo coche” en sus dispositivos de igual manera que existe el “modo avión” que elimina algunas funciones que interfieren con la seguridad de las aeronaves en pleno vuelo. Otro punto que faltó por desvelar es si hablar por teléfono con el manos libres también restará puntos del carnet mediante una nueva sanción.
Y si no le gusta el uso de los teléfonos móviles, tampoco el de los navegadores. El manejo del GPS mientras se conduce está prohibido (lo mismo que el de los móviles) aunque es algo que se sigue haciendo.
Pere Navarro admite que ya solicitaron a los fabricantes de coches que se inhabilitasen algunas funciones mientras el coche esté en movimiento; es algo que ya sucede en modelos de Hyundai y Kia, por ejemplo. Pero él mismo ha reconocido que la petición no tuvo demasiado éxito.
Otra de las guías de actuación sobre las que podría estar trabajando Pere Navarro sería la imposición de una tasa 0,0. Sobre esto se ha mostrado más laxo, pues entiende que aunque volante y alcohol son incompatibles, hay países de nuestro entorno en los que existen medidas en este sentido que no han conseguido reducir los índices de mortalidad.