La nueva generación del Toyota Prius ha conseguido una importante mejora con respecto a su anterior en aspectos como las suspensiones y la tracción, especialmente cuando es el motor eléctrico el que lo impulsa. Su imagen es más atrevida, pero parece que no lo suficiente para aquellos que gustan las versiones más radicales. Para ellos, Rowen ha creado una serie de mejoras que pueden hacer de tu híbrido un modelo asombrará a propios y extraños.
Con un espoiler infartante, estriberas, nuevas llantas, acoples LED y demás parafernalia, cualquiera que no conozca el coche espera un rendimiento similar al de un V8, es decir varios miles de centímetros cúbicos y varios cientos de caballos. Nada más lejos de lo normal pues mantiene su motor de carburación interna de 98 CV y su motor eléctrico de 72 CV, para un conjunto de 122 CV.
Aún así resulta curioso el proyecto de Rowen, puesto que es una de las compañías más afamadas de Japón en el segmento de la personalización de vehículos, y ya ha dejado su firma sobre automóviles como el BMW Z4 o el Honda Civic Type R, vehículos de los que sí se espera una mejora de imagen, y no en el caso de un híbrido.