Un Renault 4 muestra las costuras de los SUV en pleno temporal. Avanza sin problemas mientras su ‘rival’ no deja de patinar.
Son muchas las fotos para el recuerdo que ha dejado el temporal Filomena en nuestro país, imágenes que guardaremos para siempre pues son muchos los lugares en los que hacía mucho que no nevaba mientras que en otros sitios la nieve ha alcanzado niveles nunca vistos. Y, entre las postales y vídeos que nos deja este temporal destaca uno, al menos para los amantes de la conducción y los clásicos: un Renault 4 circulando tranquilamente en plena nevada y dejando atrás uno de esos SUV tan de moda que era incapaz de avanzar.
El vídeo pronto se volvió viral y circula a gran velocidad en las redes sociales y aplicaciones de mensajería. Muchos consideran al Renault 4, también conocido como 4 latas porque se vendía con un acabado L (Renault 4 L), como el primer SUV de la historia. No solo se presentaba como un modelo familiar cuando llegó al mercado allá por la década de los 60 sino también como un vehículo apto para ir al campo.
Recordada por muchos es su publicidad en la que aparecía recorriendo ríos. Y, ahora, medio siglo después de su lanzamiento (en algunos mercados estuvo a la venta hasta la década de los 90) ha demostrado que por él no pasan los años y que puede superar en rendimiento a monturas mucho más modernas e, incluso, superarlas.
El truco podría estar en los neumáticos y la electrónica
Son muchos los análisis que se pueden hacer sobre los motivos por los que este aventurero Renault 4 puede avanzar por la nieve y su ‘rival’, un Dacia Duster de tipo SUV y de aspecto todoterreno, no. Se podría hablar de los sistemas electrónicos que el clásico popular no monta y que, bajo estas circunstancias y a baja velocidad le permite avanzar. O de la diferencia de peso.
Incluso se podría comentar la diferencia de la pericia de los conductores al volante pues al de SUV se le ve dar grandes acelerones, precisamente lo que lo que hay que evitar en estas situaciones. Pero la principal diferencia podría estar en las ruedas, mucho más finas en el Renault 4 que en los SUV a la venta.
Para circular sobre nieve se necesitan ruedas con tacos muy gordos o ruedas muy finas para poder adentrarse en la nieve y traccionar, justo el tipo de neumáticos que traía de serie el 4 L. Esto, sumado a una conducción suave en marchas largas que, probablemente, utilizaba este último le permitió llegar a su destino, cosa que dudamos lograra el SUV de las imágenes.