Se habla mucho de ello pero, ¿qué es el par motor?
La prensa del motor, cuando informa de un vehículo y sus mecánicas suele dar datos como la cilindrada, la potencia, el consumo, las emisiones y el par motor máximo, ese gran desconocido. Y, encima, este último lo contextualiza con el número de revoluciones al que se consigue. Pero, ¿qué significa y qué representa ese par motor máximo en nuestro coche cuando conducimos? Vamos a tratar de explicarlo de forma rápida y sencilla.
El par máximo se mide en Nm (Newtons metro) y representa la fuerza que logra el motor en un régimen de giro concreto. Nos explicamos.
La fuerza que ejerce el motor
Un motor está compuesto por un número de cilindros y en cada uno de estos se producen unas pequeñas explosiones: el carburante entra, se mezcla con el aire y una chispa produce esa explosión que supone que el pistón salga disparado en el sentido opuesto. Este movimiento lo recoge el cigüeñal, que une todos los pistones y lo transfiere al embrague, la caja de cambios, una barra de transmisión y unos engranajes que logran que esta fuerza del motor llegue hasta el eje motriz o los ejes motrices.
En este punto se podría añadir mucha más información pues con la aparición de la electrónica y los autoblocantes se puede personalizar hasta el grado máximo la fuerza que recibe cada rueda del vehículo. Pero eso lo dejamos para otro momento.
Y el par motor máximo es…
Volviendo las explosiones que se producen dentro del cilindro, esa fuerza que ejerce la explosión sobre el pistón multiplicado por el área circular de este y el número de cilindros dará el par motor. Pero, ¿este dato es constante? No, le sucede lo mismo que al consumo, según el ciclo de explosión y el ritmo de marcha, esta fuerza será mayor o menor. Y, como es de esperar tiene un punto de fuerza máxima.
¿Todos los motores tienen el mismo par motor máximo? No. Cada motor está preparado para aguantar a un régimen de vueltas y una fuerza dentro de los propios cilindros. De ahí que se señale el par máximo de un coche como elemento diferenciador con respecto a la competencia. A mayor par motor máximo, mayor capacidad de reacción para salvar una resistencia, como una aceleración, subir una cuesta o iniciar la marcha desde parado.
Y, ahora que ya sabemos en qué consiste, toca contextualizarlo porque por sí mismo no sirve de ni revela nada.
Y, ¿para qué nos sirve?
Para saber cómo nos afecta, hay que contextualizar este dato. Esto se hace con el número de vueltas que da el cigüeñal, también conocidas como revoluciones por minuto. Ese par motor máximo se consigue a un ritmo de vueltas determinado, por ejemplo 250 Nm a 2.500 rpm. Cada motor lo logra en un momento determinado. Los diseñados e ingenieros modernos han buscado fórmulas para que el coche entregue ese par motor máximo desde muy abajo, cuando el coche circula a bajas revoluciones (en torno a las 1.500 rpm) para que la aceleración se consiga rápido.
Otros, en contra, muestran este par máximo a altas revoluciones (3.500 rpm) por lo que uno tendrá que revolucionar mucho el coche para conseguir la misma capacidad de aceleración.
Todo esto se entiende mejor con un ejemplo. Un coche, a igualdad de motor, potencia y peso con un par máximo a bajas revoluciones podrá adelantar ganando velocidad desde el mismo momento en el que inicie la operación. Sin embargo, si ese mismo par máximo lo consigue a altas revoluciones tendrá que bajar de marcha para revolucionar el coche y conseguir ese impulso que necesita para adelantar. Y, muy probablemente, cambiará de marcha durante el adelantamiento para seguir acelerando. En caso de no hacerlo, el motor se mostrará lento durante la maniobra y no se conseguirá ganar esa velocidad necesaria para ejercer el adelantamiento.