Los tests de la EuroNCAP son muy útiles a la hora de comprar un vehículo si lo que destacas es la seguridad y no solo la estética. El Audi Q5, el Land Rover Discover, el Toyota C-HR, el Citroën C3, el Fiat 500 y el Ford Ka+ han sido los últimos en pasar por sus instalaciones. No todos han demostrado ser igual de seguros en las pruebas de choque. Estos son los resultados que han obtenido:
Ha logrado la máxima puntuación que otorga el organismo, 5 estrellas, después de superar con éxito todas las pruebas. Ha estado especialmente bien valorado la protección que ofrece a los ocupantes y a los peatones y la seguridad infantil.
Además, cuenta con los sistemas de asistencia al conductor de la marca, que se incluyen en el equipamiento de serie, que aumentan la seguridad. Hay que tener en cuenta que en esta nueva generación el peso se ha reducido hasta en 90 kg, pero sin afectar a la seguridad que proporciona.
Al Discovery le ha costado conseguir la máxima puntuación en seguridad que otorga el organismo. En la prueba, tuvo un problema en el airbag del conductor. Este no se infló con la suficiente presión durante la simulación de un choque frontal parcial. Además, en la prueba de choque lateral, la puerta del conductor se desprendió, dejándolo expuesto.
Durante los próximos años, Jaguar Land Rover lanzará una serie de modelos en un breve espacio de tiempo. Michiel van Ratingen, el secretario general de EuroNCAP, espera que los ajustados tiempos de trabajo no comprometan a la seguridad de los vehículos.
Igual que el Audi Q5, el Toyota C-HR presenta unos niveles de seguridad excelentes. En concreto, ha conseguido una protección global del 95 % de los ocupantes adultos, que desciende hasta el 77 % en los infantiles y un 76 % de los peatones. La prueba en la que ha conseguido mayor puntuación ha sido en el impacto lateral.
Este vehículo incluye de serie el “Toyota Safety Sense”. Se trata de un conjunto de sistemas de seguridad y ayuda a la conducción que Toyota está introduciendo en sus nuevos modelos y en sus actualizaciones.
Se quedó solo a un paso de conseguir la puntuación máxima, al fallar únicamente en la protección a los peatones. En el resto de aspectos, como la protección a los pasajeros del vehículo, alcanza niveles de seguridad más que respetables.
La Euro NCAP ha querido probar si la reencarnación del Fiat 500, que llegó al mercado hace diez años, ha mejorado en seguridad. En la prueba de choque frontal, la protección para el conductor y para los pasajeros de los asientos traseros se mostró algo baja.
“El 500 es a día de hoy un coche antiguo y las pequeñas mejora que Fiat ha hecho en su lavado de cara no logran ocultarlo”, ha matizado Van Ratingen. Ejemplo de ello es que le faltan elementos como los pretensores en los cinturones de los asientos traseros o limitadores de carga. La mayoría de coches que se encuentran actualmente en el mercado, en cambio, sí los tienen. Tampoco dispone de la tecnología de frenada autónoma.
El Ford Ka+ presenta unos niveles de seguridad bastante discretos. Durante la prueba de choque frontal, se calificó de forma negativa la protección del torso. Igual que el Fiat 500, tampoco dispone de pretensores en los cinturones traseros ni limitadores de carga. Para mejorar en la prueba, tendría que incluir sistemas de seguridad más sofisticados, como sí están haciendo buena parte de los nuevos modelos.
