Prueba Volkswagen Tiguan 2016, robusta elegancia

El Volkswagen Tiguan 2016, el primero en utilizar la plataforma modular “MQB”, aumenta de tamaño, eleva la comodidad y estrena nuevas capacidades para rodar por el campo. Te lo contamos todo en esta prueba.

Hemos tenido que esperar un tiempo, pero ese lapso ha merecido la pena. El Volkswagen Tiguan 2016 estrena imagen y mucho más, como te contamos en esta prueba. Apoyado en una amplia variedad de motores, sazonados con tecnología de última hornada, el modelo germano luce una talla superior y unas cualidades “off road” indiscutibles. En definitiva, una fórmula de éxito, revisada y mejorada.

Mucho más acogedor

Al margen de la evidente evolución estética que ya se pudo percibir en su puesta de largo en el Salón de Fráncfort 2015, después de nuestra primera toma de contacto en Berlín, el aspecto más destacable en el Volkswagen Tiguan 2016 es el aumento de la habitabilidad y comodidad de las plazas traseras. La nueva plataforma “MQB” permite crecer al Tiguan en todas las cotas. Ahora es 6 centímetros más largo y 3 más ancho, con una distancia entre ejes 7,7 centímetros superior. Esto se traduce, directamente, en más espacio para las plazas traseras y un maletero que aumenta su volumen hasta los 520 litros, 50 más que el anterior.

Asimismo, el puesto de conducción se eleva ligeramente respecto a la anterior generación y eso se traduce en una mejor visibilidad. Todo queda a mano y mandos de control, como el que regula el “Head-up Display”, son un magnífico ejemplo de practicidad y sencillez de manejo. Además, la instrumentación digital “VW Digital Cockpit”, opcional, añade un toque de vanguardismo al interior.

Poderoso empuje

En lo que respecta al apartado dinámico, solo hemos podido conducir las versiones 2.0 TDI 190 CV 4MOTION DSG, de ciclo diésel, y 2.0 TSI 180 CV 4MOTION DSG, de gasolina. En ambos casos, lo primero que hemos podido percibir es el aplomo extra que añade la nueva generación. La suspensión ha ganado en firmeza y eso se traduce en un balanceo casi imperceptible al negociar las curvas. Además, las vibraciones y ruidos procedentes del vano motor se han reducido a la mínima expresión, especialmente en el caso del gasolina. Del mismo modo, la dirección asistida variable es más precisa y obediente a las órdenes del conductor, algo que eleva la confianza del mismo. Sin duda, hablamos de un modelo más ágil y dinámico que el anterior. La calidad de rodadura es palpable y, en muchos momentos, reproduce las buenas formas de una berlina familiar como el Passat Variant.

A por todas

Otro de los puntos fuertes del nuevo Volkswagen Tiguan 2016 es la inclusión de un nuevo modo, denominado “Offroad Individual” a los tres de la anterior generación. Gracias a él, podemos modificar a nuestro antojo, la dureza de la suspensión adaptativa “DCC”, la respuesta del acelerador y la asistencia de la dirección, por citar algunos parámetros.

Una opción muy eficaz, como hemos tenido ocasión de comprobar en un circuito todoterreno, preparado para la ocasión, que el Tiguan superó con total solvencia. Para la ocasión, utilizamos versiones con el acabado “Offroad”, que lucen una estética diferente en el frontal y la zaga, que le asegura afrontar pendientes o descensos de una forma más sencilla.

Mucho donde elegir

En el plano mecánico, el cliente podrá elegir de inicio entre tres motores: un 2.0 TSI de gasolina con 180 CV y un turbodiésel 2.0 TDI con dos niveles de potencia, con 150 y 190 CV. Posteriormente, la oferta de gasolina se ampliará con sendos 1.4 TSI con 125 y 150 CV, más un 2.0 TDI con 115 CV. Por último, llegará el todopoderoso 2.0 Bi-TDI con 240 CV. Por supuesto, el cliente podrá elegir entre tracción delantera o integral “4MOTION”, así como entre una caja de cambios manual de seis velocidades o una automatizada de doble embrague “DSG”, de siete.

Buena sintonía

La dotación tecnológica también es una baza fundamental en el Volkswagen Tiguan 2016. Según versiones, puede incluir faros con tecnología LED “Full LED”, siete airbags, incluyendo uno de rodilla para el conductor, varios sistemas de ayuda a la conducción como el sistema de frenada de emergencia automática en ciudad con detección de peatones “Front Assist”, el asistente de cambio involuntario de carril “Side Assist” y un novedoso sistema de capó activo “Active Bonnet”. En materia de infoentretenimiento, la oferta también es consistente, destacando el denominado sistema “Car-Net” que, entre otras cosas, engloba diferentes funciones como la llamada de emergencia automática “e-call”, la conexión a Internet o diversos servicios “on line” de mantenimiento del vehículo. Para finalizar, la gama estará dividida en tres acabados: “Edition”, “Advance” y “Sport”. Al mismo tiempo, también se podrá añadir paquetes de equipamiento, como el conocido “R-Line”, que ya estaba presente en la anterior generación. Todo por un precio que arranca en los 29.560 € del 2.0 TDI con tracción delantera y cambio manual.

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