Del SEAT Ateca hemos hablado mucho. Te hemos ofrecido la primera información. Te hemos contado cuáles serían sus principales rivales. Te hemos mostrado su inspiración, el prototivo 20V20. Te lo hemos enseñado en vídeo. Incluso, te hemos contado cómo conocerlo online. Pero, por fin, la espera ha terminado. En el momento de empezar a escribir estas líneas, acabo de bajarme de un flamante Ateca 2.0 TDI 150 CV, dotado de tracción total, cambio manual y acabado “XCELLENCE”. Sin duda, el mejor momento para contarte cómo pretente colocarse entre los tres todocaminos compactos más vendidos de nuestro mercado.
Para SEAT, la importancia de este nuevo modelo reside en que debe colocarse como su tercer gran representante, junto a los otros dos auténticos superventas de la casa: el Ibiza y el León. De ahí que el aspecto estético sea de suma importancia. En este sentido, el Ateca recoge las líneas de sus compañeros de gama… para reinventarlas por completo. Eso sí, adopta los rasgos propios que debe lucir todo buen todocamino: un poderoso frontal, distintas protecciones para los bajos y la carrocería, unos pasos de rueda ensanchados y una altura libre al suelo considerable, cifrada en 187 milímetros.
Por fuera, existe la posibilidad de escoger entre doce colores para la carrocería, mientras que el habitáculo puede lucir distintos tipos de tapicerías, elaboradas en materiales como tela, piel y Alcantara. Del mismo modo, dependiendo del acabado escogido, existe la posibilidad de equipar elementos como unas llantas de aleación de hasta 19 pulgadas. Otro aspecto llamativo, propio de segmentos superiores, es la iluminación ambiental, con ocho tonalidades y diferentes niveles de intensidad. En este enlace puedes ver todas las fotos del modelo español.
A pesar de lo que pueda parecer a primera vista, el Ateca se posiciona como un vehículo sumamente compacto; al menos, más de lo que se estila en la categoría. Una ventaja, no cabe duda, sobre todo, a la hora de moverse por la ciudad. Construido sobre sobre la plataforma modular “MQB”, la misma que emplea el León o un rival directo como el Tiguan, declara 4,36 metros de largo, 1,84 de ancho y 1,60 de alto. De este modo, comparado con su competidor alemán, resulta 12 centímetros más corto. Un detalle que nos indica cual es su verdadero objetivo: el Nissan Qashqai, el líder absoluto de la categoría, que se queda en unos cercanos 4,38 metros. De hecho, ya nos hemos planteado cuál de los dos es más interesante…
En ocasiones, contar con una longitud comedida puede convertirse en un problema, al hablar de espacio interior. Sin embargo, uno de los puntos más destacables del Ateca reside en ofrecer una habitabilidad de primera. Con una batalla de 2,64 metros, la misma que un León ST, en las plazas traseras ofrece una altura sobresaliente, combinada con un espacio para las piernas realmente bueno. La única pega se la pondríamos a la anchura de la plaza central, si la va a utilizar un adulto. Del mismo modo, el espacio para colocar los pies resulta algo reducido.
Por otra parte, el maletero está entre los mejores del segmento, ya que alcanza los 510 litros de capacidad; una cifra que, en el caso de las versiones con tracción total, se reduce hasta los 485.
Al igual que el Ibiza y el León, que siempre están entre los más vendidos de su categoría, el Ateca aspira a colocarse entre los tres todocaminos más populares de nuestro mercado. Al menos, es el objetivo que se han marcado en SEAT… Un propósito que, viendo la evolución del mercado, no parece descabellado. A fin de cuentas, en España, las ventas de todocaminos compactos subieron un 22,4 por ciento, en 2015, mientras que los SUV pequeños lo hicieron un 42,5 por ciento. Precisamente ese será el escenario en el que la firma española pondrá en liza un nuevo modelo, a lo largo de 2017.
Como curiosidad, diremos que, antes de su llegada a los concesionarios, ya se habían vendido unas quinientas unidades… ¿Alguien duda de que alcanzará el podio?
La gama inicial está compuesta por cinco mecánicas, dos de gasolina y tres de ciclo diésel, dotadas de inyección directa y turbocompresor. Empezando por los turbodiésel, los de mayor aceptación en el segmento, aparece el 1.6 TDI, con 115 CV y 4,2 litros cada 100 kilómetros, que deja paso al 2.0 TDI, con dos niveles de potencia, 150 y 190. Pasando a los de gasolina, el escalón de acceso queda representado por el 1.0 TSI, un propulsor tricilíndrico de 1,0 litros de cilindrada, que entrega 115 CV y declara 5,2 litros de consumo medio. En segundo lugar, aparece el 1.4 EcoTSI, un propulsor tetracilíndrico de 150 CV, que incorpora el sistema de desconexión selectiva de cilindros “ACT”. Por supuesto, todos incorporan con el sistema de parada y arranque automáticos del motor “Start/Stop”.
Dependiendo de la versión escogida, es posible decantarse por la tracción delantera o la total “4Drive”. Del mismo modo, también se puede escoger entre una caja de cambios manual, de seis marchas, o la automatizada de doble embrague “DSG”, de siete.
Durante la toma de contacto, llevada a cabo en la presentación internacional, me he puesto al volante de dos propulsores, uno de gasolina y otro turbodiésel, ambos de 150 CV y asociados a la caja manual de seis relaciones. Empezando por el primero, me ha sorprendido el agrado de conducción que ofrece, su buena respuesta y su funcionamiento, elástico y progresivo. No hace falta apurar cada marcha para obtener lo mejor de la mecánica 1.4 EcoTSI, pero sí se hace, no tiene ningún problema en acercase a la zona roja del cuentarrevoluciones. Aunque su consumo medio homologado es algo mayor, 5,3 litros cada 100 kilómetros, declara una velocidad máxima de 201 km/h. Otro aspecto que me gusta es el cambio manual, que presume de un tacto bastante preciso. Durante el recorrido, que transcurre en el entorno urbano de Barcelona, el Ateca demuestra gran agilidad para callejear, fruto de la contenida longitud que declara.
Para salir fuera de la urbe, por carreteras de montaña y autovías, opto por una unidad dotada del motor 2.0 TDI de 150 CV, asociada a la tracción total. En este caso, se nota un mayor poderío en la respuesta, sobre todo, a bajo régimen. Además, permite mantener cruceros elevados sin aparente esfuerzo… ni demasiada sonoridad. En este sentido, el trabajo de insonorización que se ha llevado a cabo en el habitáculo es bastante bueno. En los tramos virados, el Ateca sigue mostrándose igual de ágil, gracias, en parte, a un tren delantero bastante preciso… para tratarse de un SUV. Del mismo modo, transmite una gran sensación de aplomo, con unas suspensiones que, sin llegar a incomodar a los pasajeros, contienen al máximo el balanceo de la carrocería.
Fuera del asfalto, el primer punto a su favor es contar con una altura libre al suelo de casi 19 centímetros. Por tanto, no tiene ningún problema a la hora de enfrentarse a pistas de dificultad baja y media. Otro aspecto que le favorece es la inclusión de la tracción total 4Drive que, en resumen, recurre a un esquema similar al empleado en el León X-PERIENCE: el embrague central multidisco Haldex de quinta generación. El tercer aspecto importante es la inclusión de dos modos adicionales en el “SEAT Drive Profile”, uno para nieve y el denominado “Offroad”. Como es lógico, también cuenta con el control de descenso de pendientes “Hill Descent Control”.
No exagero si me refiero al Ateca como el SEAT más tecnológico de la historia. En primer lugar, puede contar con algunos elementos que ya luce el propio León. Me estoy refiriendo, por ejemplo, a los faros con tecnología de tipo LED “SEAT Full LED” o el control dinámico de la conducción, que adopta un nuevo mando, con forma circular, que permite entre elegir entre cuatro o seis programas, dependiendo del sistema de tracción por el que se opte. Como mencionaba más arriba, los dos adicionales están destinados a circular fuera del asfalto o en superficies de baja adherencia.
También destaca en seguridad, al ofrecer el control de velocidad de crucero adaptativo “ACC” con “Front Assist”, un sistema de reconocimiento de señales de tráfico, otro de control del ángulo muerto, el de aparcamiento asistido “Park Assist 3.0” o un asistente de salida de aparcamiento trasero. Pero la gran novedad viene de la mano de un sistema de visión periférica o del asistente de conducción en atascos “Traffic Jam Assist”, que acelera, frena y mantiene al coche dentro del carril hasta 60 km/h. También, de un portón con apertura y cierre eléctricos –y accionamiento manos libres– un cargador de teléfono por inducción o un sistema de infoentretenimiento con aplicaciones como Apple CarPlay, Android Auto y MirrorLink.
Por último, diremos que la comercialización arranca con dos terminaciones, ambas bastante completas: “Style”, la intermedia, y “XCELLENCE”, la más completa.Por tanto, la horquilla de tarifas oscila, sin tener en cuenta descuentos ni promociones, entre los 23.690 y los 37.790 €. A finales de año, en torno al mes de diciembre, la gama se completará con la llegada de un tercer acabado, llamado “Reference”, que se situará como la variante de acceso a la gama. Su precio será 2.250 € inferior al modelo Style equivalente.
Prueba SEAT Ateca 2.0 TDI CR 150 CV Start & Stop | |
Tipo de motor | Diésel, 4 cilindros en línea, turboalimentado |
Cilindrada | 1.968 cm3 |
Potencia | 150 CV entre 3.500 y 4.000 rpm |
Par máximo | 340 Nm entre 1.750 y 3.000 rpm |
V. máxima | 202 km/h |
Aceleración | N.D. |
Consumo | 4,3 l/100 km (mixto) |
Medidas | 4.363 / 1.841 / 1.601 mm |
Neumáticos | 215 / 55 R 17 |
Peso en vacío | 1.342 kg |
Maletero | 510 l |
Precio base | 28.130 € |
Lanzamiento | Junio de 2016 |
PRECIOS SEAT ATECA | ||
Versión | Potencia | Precio desde |
Gasolina | ||
1.0 TSI 115 CV St&Sp Ecomotive | 115 CV | 23.690 € |
1.4 EcoTSI 150 CV St&Sp | 150 CV | 25.730 € |
Turbodiésel | ||
1.6 TDI CR 115 CV St&Sp | 115 CV | 26.370 € |
2.0 TDI CR 150 CV St&Sp | 150 CV | 28.130 € |
2.0 TDI CR 190 CV St&Sp | 190 CV | 30.240 € |
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