Probamos el Renault Kadjar Black Edition, acertada combinación

Nos ponemos a los mandos del Renault Kadjar TCe 160 EDC Black Edition.

El renovado SUV medio del rombo contempla una nueva gama de motores entre la que destaca esta variante de gasolina sobrealimentada asociada a la última evolución del cambio automático EDC, de 7 velocidades. El Renault Kadjar ofrece confort y eficiencia a partes iguales.

Otro de los atractivos de la actualizada gama Renault Kadjar, además de los motores, es la edición especial Black Edition que ilustra este espacio y que exhibe un aire más dinámico y deportivo.

Imagen campera

Destaca por las barras longitudinales del techo, las llantas de 19 pulgadas en color negro, protecciones delanteras y traseras en contraste con la carrocería, carcasas de retrovisores pintadas en negro y un completísimo equipamiento. Una versión sin duda visualmente lograda que mejora mucho la presencia del modelo.

Un nuevo Renault Kadjar, que respecto al anterior se diferencia además por pequeños cambios de aspecto exterior e interior, estrena elementos de equipamiento.

Vamos por partes. Los cambios exteriores afectan a los paragolpes, la parrilla es más ancha, hay una antena de tipo ‘aleta de tiburón’ para las versiones más equipadas, nuevos faros y luces antiniebla rediseñadas que (en los acabados más altos son de LED)…

También varían las luces diurnas con intermitentes integrados, los intermitentes posteriores, la luz de marcha atrás y los antiniebla posteriores.

Nos asomamos al interior

Dentro hay pequeñas mejoras que se aprecian enseguida, como la nueva pantalla del sistema multimedia y el diseño de los mandos de la climatización debajo de esa misma pantalla, de manejo más cómodo, así como molduras decorativas en consola y paneles de puerta. Se aprecian materiales y ajustes (salpicadero y otras coberturas) más vigilados. Un pequeño avance cualitativo.

A los mandos te sientes enseguida muy a gusto por las amplias posibilidades de regulación de sus confortables asientos. Tanto delante como detrás, el Renault Kadjar ofrece mucho espacio para un gran confort de vida a bordo.

Muy agradable

En marcha, bastan pocos kilómetros para apreciar que el motor TCe de 1,3 litros ofrece una respuesta más agradable de lo que cabría esperar de tan baja cilindrada sobre una carrocería grande, como la de este SUV de Renault.

Además de mostrar mucha suavidad desde baja velocidad, es especialmente silencioso en conducción tranquila, como en entornos urbanos, donde inicia la marcha y gana velocidad con suavidad.

Se combina a la perfección con el cambio automático EDC de siete velocidades. Quizás no sea el más rápido y eficiente de su tipo pero, a cambio, es especialmente agradable por la suavidad con que engrana marchas, lo que hace el día a día muy gratificante, sobre todo en su modo de funcionamiento ECO, que atenúa los consumos si practicamos una conducción eficiente, manteniendo el acelerador en la primera parte del recorrido.

Eficiencia mecánica

En esas condiciones, hace valer su baja cilindrada para ofrecer medias de no más de 6 l/100 km. Otra cosa es en carretera, donde las cifras escalan según la conducción, más sensible que en un diésel a los cambios de ritmo que marcan trazado y orografía.

Aun así, hay que hacer valer que se trata de un SUV de 4,5 metros de largo, casi tonelada y media de peso y motor de 160 CV con caja automática. No es la mejor de las combinaciones para aquilatar un gasto que, aun así, es razonable.

A cambio, el dinamismo de esta arquitectura mecánica permite moverse a ritmo alto con suma facilidad, disfrutando de buen reprís desde velocidades medias para adelantar o mantener cruceros solventes (velocidad máxima por encima de 200 km/h) sin apenas esfuerzo.

Es más, en torno al límite legal se queda en poco más de 7,0 l/100 km, si bien por carreteras de segundo orden con adelantamientos repetidos y cambios constantes de ritmo no es difícil pasar de 8,0 litros.

Rodador de fondo

En suma, un motor, en términos generales, de lo más recomendable por suavidad y rendimiento general, más eficiente en carretera que muchos predecesores, agradable y hasta silencioso si no aceleramos de continuo. Donde apenas hay cambios en la nueva gama del Renault Kadjar es en sus cualidades ruteras, repasando chasis y suspensiones.

Las llantas de 19 pulgadas de este Black Edition determinan en cierto modo sus maneras, pues aportan mejor tacto a una dirección que, sin ser referencia de su tipo por precisión o rapidez, sí transmite confianza desde los primeros movimientos de volante.

Muy adecuado para el traslado de cuatro adultos o, por ejemplo, de dos y tres niños, mantiene además mucho confort de rodadura y se siente incluso un punto más aislado (redundando en la aportación mecánica en este mismo capítulo), lo que se agradece, y mucho, tanto en largos viajes como en uso cotidiano.

Texto: Alfonso Aguilera // Fotos: Paloma Soria

Ficha técnica Renault Kadjar TCe 160 EDC Black Edition

*Importe aproximado para 4 años y 25.000 km anuales

Equipamiento Renault Kadjar TCe 160 EDC Black Edition

De serie: Airbags de cabeza delanteros y traseros; airbags laterales delanteros; alerta por cambio involuntario de carril; asistencia a la frenada de emergencia; aviso de ángulo muerto; ayuda de arranque en pendientes; cambio automático de luces de carretera/cruce; control de presión en neumáticos; cámara de visión trasera; faros LED; faros antiniebla LED; reconocimiento de señales de tráfico; regulador-limitador de velocidad; retrovisores exteriores abatibles electricamente; asientos delanteros con ajuste eléctrico; asientos delanteros con calefacción; asientos delanteros con ajuste lumbar; climatizador bizona; encendido automático de luces de cruce; freno de parking asistido; función Stop&Start; limpiaparabrisas con sensor de lluvia; portón del maletero eléctrico; techo panorámico; luces traseras LED; compatibilidad con Android Auto y Apple CarPlay; Bluetooth para móvil y audio; navegador R-Link 2; conexión USB; radio CD-MP3; pintura bitono; kit de reparación de neumáticos y aparcamiento manos libres.

Opcional: Pintura Rojo Deseo, Azul Rayo o Verde Oliva (727 euros); pintura metalizada (520 euros) y rueda de repuesto de emergencia o tipo galleta (103 euros).