Prueba del Jaguar F-TYPE SVR: artillería pesada

Nos fuimos a Motorland para la prueba del Jaguar F-TYPE SVR

Aún más rápido, más potente, más ligero… Los fabricantes de coches deportivos siempre se guardan una bala en la recámara para poner el punto culmen a su gama de producto. En Jaguar, la división de Operaciones de Vehículos Especiales del grupo Jaguar Land Rover, conocida por las siglas “SVO”, ha sido la encargada de dar una vuelta de tuerca más al modelo. El resultado te lo contamos en esta prueba del Jaguar F-TYPE SVR.

Aunque los pedidos comenzaron a principios de año y las primeras entregas se producirán a partir del verano, no ha sido hasta ahora cuando nos hemos subido a uno de los deportivos más bestias del momento. Las impresiones de la prueba del Jaguar F-TYPE SVR, además, las teníamos guardadas en el cajón de la redacción, haciendo caso al embargo obligado por la marca. Pero ya nos han “liberado” y estas son nuestras conclusiones…

El Jaguar más rápido

Como ya te adelantamos en diferentes informaciones publicadas en esta web, este F-TYPE es el coche de producción más rápido y potente jamás creado por la marca. El imponente motor V8 de 5,0 litros de cilindrada, sobrealimentado mediante un compresor volumétrico, eleva su potencia hasta los 575 CV, es decir, 25 más que en el F-TYPE R. De la misma forma, el par máximo se sitúa en 700 Nm entre 3.500 y 5.000 rpm.

Los datos oficiales suministrados por la firma británica hablan de una velocidad máxima de 322 km/h, en el F-TYPE SVR Coupé, y de 314, en el F-TYPE SVR Convertible. Ambos logran acelerar de 0 a 100 km/h en solo 3,7 segundos.

Para conseguir estos espectaculares registros, el biplaza inglés adopta un paquete aerodinámico mejorado. Junto a los nuevos paragolpes delantero y trasero y a un fondo plano rediseñado, destaca el remozado difusor posterior y el alerón activo, fabricado en fibra de carbono. Este se despliega automáticamente cuando se alcanza una velocidad de 95 km/h en el Coupé y de 110 en el Convertible. En el modo de conducción dinámico, siempre está operativo.

Por otro lado, el chasis también se ha optimizado. Monta nuevos amortiguadores y barras estabilizadoras. Las llantas forjadas de aluminio, de 20 pulgadas, consiguen una reducción del peso muy importante, de 13,8 kilos por coche. En esta “dieta” también tiene mucho que ver el nuevo sistema de escape, aligerado en 16 kilos, y los frenos carbocerámicos opcionales, que aseguran la rebaja de otros 21.

Impresiones en carretera

La primera prueba del Jaguar F-TYPE SVR la hacemos con la variante descapotable. En el recorrido planteado, desde Lérida a Alcañiz, ya en territorio aragonés, sorprende algo con lo que, a priori, no contábamos: el elevado confort de marcha.

La suspensión deja que la carrocería absorba, sin sequedad, las imperfecciones del pavimento, brindando una marcha razonablemente cómoda, tratándose del F-TYPE más deportivo de la gama. El ondulado estado de la carretera, camino del circuito de Motorland, nos permitió comprobar el buen trabajo realizado sobre el chasis. Aunque no todo fue positivo. Tanto yo como mi compañero de viaje comentamos la excesiva sensibilidad de la dirección; con un poco de giro, el coche cambia la trayectoria sin dilación, obligando a estar muy atentos para corregir si nos pasamos de fuerza sobre el volante.

Para el cambio, recurre a una caja automática de ocho velocidades, con manejo manual/secuencial. Las levas de aluminio anodizado, en el volante, son más grandes que en el resto de la gama, facilitando su uso. También se puede cambiar a través de la palanca. En todo caso, la transición entre marchas se produce con mucho refinamiento y una rapidez considerable. No es un sistema de doble embrague pero se defiende bastante bien.

Por cierto, sin capota, las turbulencias que se generan en el habitáculo no son excesivamente molestas. Más aún cuando apenas las prestas atención y te deleitas con el fantástico bramido del V8. Hay pocos automóviles que suenen tan bestias como este, al que siempre acompaña una traca de “explosiones” al cambiar de marcha o decelerar. Para que te hagas una idea, aquí tienes un vídeo de cómo ruge el Jaguar F-TYPE SVR en Nueva York.

Como no podía ser de otra forma, el empuje del motor resulta sobrecogedor, convirtiendo en pequeña cualquier recta con la que nos encontramos. En la relación de cambio más larga, la mecánica alcanza los 120 km/h a solo 1.500 vueltas, un régimen de lo más relajado. Para aprovechar todo su potencial, lo mejor es acudir a una pista de velocidad, y si es tan espectacular como la de Motorland, mejor que mejor.

Prueba del Jaguar F-TYPE SVR en circuito

En este caso, dejamos el Convertible para tomar los mandos del Coupé. A decir verdad, las sensaciones iniciales son parecidas pero en cuanto nos hemos aprendido el trazado, ayudados por un monitor de  la casa, realmente nos damos cuenta de otros aspectos del coche.

Por ejemplo, el sistema de tracción total hace prevalecer la entrega de par en el eje trasero, aunque siempre con el plus de motricidad que aporta el delantero. Mientras en carretera abierta optamos por circular en el programa de conducción normal, ahora activamos el “Dynamic mode”. El alerón trasero, el diferencial autoblocante, el control de estabilidad “DSC”, la tracción total, el cambio y la dirección adoptan un perfil más deportivo. Con este modo, el F-TYPE se permite ciertas alegrías en forma de suaves derrapadas del tren posterior. Si nos pasamos con el gas a la salida de la curva, algo esencial para no desperdiciar toda la caballería disponible, la electrónica sí que actúa en mayor medida. Sin embargo, siendo refinados con nuestros movimientos, se puede ir muy rápido y confiado.

Volviendo a la dirección, en el circuito tuvimos mejores sensaciones, agradeciendo ese tacto tan directo. No obstante, y pese a la cura de adelgazamiento del modelo, en los cambios de dirección más bruscos a este Jaguar aún le sigue costando circunscribirse a la trazada elegida. En cuanto a la frenada, los discos carbocerámicos, opcionales pero montados en nuestras unidades, ofrecen una potencia muy buena, aunque en el primer recorrido del pedal parecen no tener mucho mordiente.

En la larga recta, no la de meta, sino la anterior antes de terminar la vuelta, llegamos a ver en el marcador 288 km/h, y dejando bastante margen para hacer frente a una fuerte frenada. Hace unas semanas, Michelle Rodríguez, la actriz protagonista de la saga “A todo gas” alcanzó 323 km/h en el desierto de Nevada. Es solo una muestra de las excelentes prestaciones que vivimos en esta primera prueba del Jaguar F-TYPE SVR, un automóvil sublime y solo apto para unos privilegiados. Tan exclusivo como su precio. El Coupé cuesta 158.600 € y el Convertible 166.600.

Galería de fotos de la prueba del Jaguar F-TYPE SVR