Si el Nissan Juke ya sorprendió cuando llegó hace diez años, ahora lo vuelve a hacer. Y lo hemos podido comprobar.
Tras conocerlo en estático por fin hemos podido conducir la segunda generación del Nissan Juke. El creador del segmento de los SUV urbanos (aunque en la firma nipona prefieren emplear el térmico crossover) llega con argumentos renovados para intentar liderar de nuevo su categoría. ¿Lo conseguirá? Aquí te lo contamos.
Cómo hemos cambiado, ¿verdad? Si alguien llega a pensar hace una década que los todocaminos iban a dominar el mercado, muchos se hubieran llevado las manos a la cabeza. Y no solo eso, sino que si además le dicen que el único segmento que iba a registrar un crecimiento positivo sería el los SUV urbanos, habrían acabado por infartar del todo.
Pero así es. Hace una década nadie sabía lo que era un crossover urbano, hasta que llegó Nissan y nos presentó el Nissan Juke. Un modelo peculiar, en todos los sentidos, que recibió tanta admiración como crítica pero que se encargó de mostrar el camino al resto de fabricantes.
Tal es así que en 2014, año de su primera actualización, el número de rivales ya había aumentado a 10 y para este 2019 la cifra ya era de nada menos que 24. ¿Verdad que hemos cambiado?
Sigue vigente
Quizá por esta mayor competencia y porque 10 años son demasiados para un mismo modelo, Nissan ha escogido este momento para presentar la segunda generación de su segundo crossover más querido.
Y eso que el Nissan Juke ha sabido defenderse liderando su categoría u ocupando el podio en siete de los últimos nueve años, pero las ventas en estos últimos tiempos han decrecido tanto que en la actualidad ocupaba el puesto décimo del segmento con poco más de 7.000 unidades.
Impresiona
Sin llegar a entrar de lleno en los aspectos estéticos o de habitabilidad más destacados, pues estos ya os los contamos en la primera toma de contacto que tuvimos hace algo más de un mes, lo cierto es que sí podemos confirmar que este nuevo Nissan Juke impresiona en movimiento.
Con una silueta más grande (crece en todas sus cotas llegando a los 4,21 metros de largo) e imponente, es todo un acierto haber mantenido sus rasgos estéticos diferenciadores, como los faros delanteros redondeados o su caída del techo más pronunciada con el tirador oculto en el marco, y haberlos complementado con nuevos elementos tales como las llantas de 19 pulgadas o la carrocería bicolor.
Grande, no cabe duda
Por dentro, además del salto cualitativo experimentado, sobre todo en las versiones más altas que ofrecen molduras en Alcantara o cuero, destaca la mejora en la conectividad y la habitabilidad. El primer punto se observa con la doble pantalla digital, una de 7 pulgadas para el cuadro de instrumentos y otra de 8,0 para la consola central, táctil y de tipo flotante que además de incorporar Apple CarPlay y Android Auto desde el segundo nivel de acabado, puede sumar TomTom Maps & Live Traffic, punto de acceso WiFi y el Google Assistant.
A todo ello se añade la app NissanConnect Services para, a través del móvil, comprobar distintos parámetros de tu Nissan Juke como el bloqueo de puertas, presión de neumáticos, nivel de aceite, etc.
En cuanto al espacio, la ganancia externa repercute en un interior más amplio, principalmente en una zona trasera con casi 6 cm más de hueco para las piernas o de 1,1 cm para la cabeza. Dos viajarán sin problema alguno, incluso si el conductor mide más de 1,85 cm, mientras que el maletero experimenta un crecimiento del 20% llegando ahora a los 422 litros.
Capacidad que no solo permite la carga de más maletas (encajan fácilmente cuatro trollies de mano), sino que se acompaña de una boca más amplia que facilita el almacenamiento de objetos.
Madurez dinámica
Pero el motivo de nuestro regreso a Barcelona no era otro que, por fin, ponernos a sus mandos. La elección mecánica era fácil, pues el Nissan Juke únicamente se oferta con el bloque gasolina 1.0 DIG-T tricilíndrico de 117 CV. Una apuesta arriesgada por escasa pero que Nissan justifica porque afirma que con las dos transmisiones disponibles, la manual de seis relaciones y la automática DCT de doble embrague y siete marchas, cubren el 80% de la demanda del segmento de los SUV urbanos.
La jornada empieza con la caja manual. Únicamente necesitamos unos pocos kilómetros y un par de enlazadas para comprobar que este Nissan Juke ha madurado a nivel dinámico. El empleo de la plataforma CMF-B (la misma de los nuevos Renault Clio o Renault Captur) le reporta un 13% más de rigidez, al tiempo que rebaja el peso en 23 kilos. En marcha, se traduce como un vehículo más divertido de conducir.
Sensación que se incrementa con el inédito modo Sport, seleccionable a través del comando central, que varía la respuesta del motor, del cambio (en el caso del DCT) y de la dirección, endureciéndola ligeramente y haciéndola más reactiva. Pese a esta madurez dinámica, el Nissan Juke se mantiene como un SUV de filosofía rutera.
Es más intuitivo de inscribir en la curva, pero sigue lastrado por esa carrocería elevada y por unas llantas de 19”.
Más que suficiente
En cuanto al motor, es un bloque que se muestra voluntarioso, sobre todo cuando superamos las 2.000 rpm pues por debajo resulta ser algo perezoso. Al sobrepasar dicho régimen, se suelta y aunque no ofrece unas prestaciones de escándalo, acelera de 0 a 100 km/h en 10,4 segundos y marca una punta de 180 km/h, resulta más que suficiente para mover los poco más de 1.100 kilos que registra con la manual y 1.207 kilos, con la automática.
Ya que hablamos de transmisiones, si tuviéramos que escoger una, sería la automática. Cierto es que tiene un incremento de 1.400 euros frente a la manual, pero consigue sacar el máximo partido al rendimiento del motor y, además, ofrece unas levas tras el volante con las que poder cambiar a modo manual en cualquier momento.
Ojo, que ello no implica que la manual sea mala, pues ofrece un tacto directo y bien escalonado, pero sí nos ha parecido más tosca que la DCT.
Junto al programa Sport aparecen los Eco y Standad. Con el segundo, el Nissan Juke se muestra algo más noble, mientras que con el más eficiente no solo notamos cierta pérdida de empuje general, sino que además lograremos que el consumo se reduzca por debajo de los 6 l/100 km con facilidad.
Líder en seguridad
Donde el Nissan Juke sí que se desmarca de su competencia es, sin duda, en seguridad. Desde los acabados más básicos incorpora control de velocidad de crucero con limitador de velocidad, sistema de llamada e-call, asistente de frenada de emergencia en ciudad con detección de peatones y ciclistas, asistente activo de mantenimiento de carril, sistema de reconocimiento de señales de tráfico y asistente de iluminación de carretera.
A todo ello se suma, en los dos niveles superiores, el afamado sistema ProPilot de conducción semi-autónoma (con control de velocidad de crucero adaptativo y asistente de atascos) o el sistema de alerta por ángulo muerto, inédito en la familia Nissan.
Gama y precios
Para verle rodar por nuestras carreteras aún habrá que esperar hasta finales de noviembre aunque la marca ya ha abierto la cartera de pedidos y la configuración del mismo. Disponible en cinco acabados: Visia, Acenta, N-Connecta, N-Desing y Tekna, los precios parten, sin descuentos, de los 19.900 euros, llegando a los 25.950 euros de cualquiera de los dos últimos asociados al DCT.
Pero además, Nissan propone una edición limitada a 60 unidades denominada ‘Premiere Edition’ que, en resumidas cuentas, vendría a ser el Nissan Juke más equipado y chic que te puedes llevar al garaje pues incorpora todo lo imaginable. Su precio, 28.850 €.
Texto: Karam el Shenawy
Nissan Juke 1.0 DIG-T 117 CV N-Connecta
TIPO DE MOTOR | Gasolina, 3 cilindros en línea, turbo |
CILINDRADA | 999 cm3 |
POTENCIA | 117 CV a 5.250 rpm |
PAR MÁXIMO | 200 Nm entre 1.750 y 3.750 rpm |
VELOCIDAD MÁXIMA | 180 km/h |
ACELERACIÓN | 10,4 s (0 a 100 km/h) |
CONSUMO (WLTP) | 5,9 l/100 km (mixto) |
MEDIDAS (L/A/AL) | 4.210 / 1.800 / 1.595 mm |
NEUMÁTICOS | 215 / 60 R 17 |
PESO EN VACÍO | 1.182 kg |
MALETERO | 422 l |
PRECIO BASE | 22.400 € |
LANZAMIENTO | Noviembre de 2019 |