El Volkswagen e-Golf y el Hyundai Kona Eléctrico se muestran como los nuevos vecinos.
Han venido para quedarse, y aunque de momento son minoría ya generan debate en el vecindario: “¿Has visto el eléctrico que aparca en la plaza doce?”; “Pero, eso es solo para ciudad, ¿no?”; “Pues parece un coche normal…” Comentarios a colación de dos coches que prescinden del diésel o de la gasolina para moverse únicamente por motores eléctricos. Enfrentamos al Volkswagen e-Golf y al Hyundai Kona Eléctrico.
Y todo, sin parecerlo. La situación no es nueva para el Volkswagen Golf. El compacto de Volkswagen, desde una absoluta discreción, vuelve a plantear en la gama una variante eléctrica.
Esta segunda generación mantiene ese aire prudente a la hora de mostrar su electrificación: apenas le distinguen del resto de gama un ribete azul en faros y parrilla, un paragolpes delantero específico que integra distintivas luces diurnas en forma de C o unas llantas también exclusivas.
Sin precedentes
Por su parte, el Hyundai Kona eléctrico desembarca como producto totalmente nuevo en el catálogo Hyundai, desde su llegada con gran acogida. Ya es el segundo modelo más vendido de la firma asiática (muy cerca del Hyundai Tucson), y esta versión EV en concreto también se ha posicionado entre los eléctricos más demandados (a la estela del líder Nissan Leaf).
Su apuesta se divide en dos opciones: una con motor eléctrico de 204 CV y batería de 64 kWh (autonomía de hasta 449 km) y la que nos ocupa, equiparable al Volkswagen e-Golf, de 136 CV (como él) y batería de 39,2 kWh.
Enfocados a la ciudad, pero…
Hablamos de dos eléctricos que, por los datos que homologan, parecen orientados a la ciudad, dinámica aparte. El alemán, con su batería de 35,8 kWh (en la primera generación era de 24,2) asegura una autonomía de 230 km en nuevo ciclo WLTP. El coreano, con la capacidad superior citada, eleva esa cifra a 289 km.
Resulta curioso cómo cambia la percepción de la conducción en un coche eléctrico, supeditado a la limitación de los puntos de carga (en casa, trabajo, centros comerciales…), minoritarios frente a las gasolineras, lo que obliga a medir con suma prudencia el rendimiento que queremos obtener.
Para ello, en el caso del Volkswagen e-Golf disponemos de los programas de uso Normal, Eco y Eco+. A decir verdad, el vehículo se conduce con facilidad porque no hay marchas convencionales: seleccionas la D desde la palanca y a correr… Claro que, como decía, la autonomía puede ser muy variable, más que con motor de combustión.
En posición Normal no hay restricción para liberar toda la potencia: la aceleración es muy buena, en arrancadas cortas, más que en el 0 a 100 km/h, y no le cuesta mucho llegar hasta su velocidad máxima, limitada a 150 km/h. En Eco y Eco+ acusa menos impulso hasta del climatizador (en el segundo, hasta lo anula), si bien pisando el pedal a fondo, hasta sentir el kick-down, vuelve a dar toda su fuerza, útil para momentos puntuales aunque circulemos en estos programas.
¿Decía conducción fácil?
Sí, aunque aún hay más funciones a conocer para ganar autonomía, como los tres modos de frenada regenerativa activables desde las levas o la palanca, más uno que deja el coche sin retención al soltar el acelerador.
Tanto el funcionamiento del Hyundai Kona como su rendimiento son parejos al alemán. Son los programas Eco, Comfort y Sport los que establecen distintos niveles de entrega de potencia y uso del climatizador. Y, como el rival, propone varios puntos de regeneración al soltar acelerador.
En el Hyundai Kona eléctrico son más acusados: sin tocar freno casi detiene la marcha antes de llegar a un semáforo. Otro apunte del coreano es que, tirando de la leva izquierda actúa como freno. Como el Volkswagen e-Golf, la aceleración es muy notable, muy superior a la de cualquier Hyundai Kona saliendo desde parado.
Más de 200 km…
Así las cosas, durante nuestra prueba hemos obtenido valores de alcance muy variables, la principal preocupación al moverse con este tipo de vehículos. En ciudad y circunvalaciones sacan más provecho a su propulsión eléctrica. Y en este sentido están realmente igualados.
Con cualquiera es factible gastar en torno a 13 kWh/100 km. Es decir, con las baterías que dispone el Hyundai Kona sería capaz de acercarse a 300 km, y el Volkswagen e-Golf, a 275 km. ¿Y en carretera? Ahí la cosa cambia.
Con el alemán hemos llegado a unos 200 km, a una velocidad constante entre 100 y 120 km/h, jugando con los distintos modos de conducción. Con el Hyundai Kona eléctrico, 20 km más, fruto de una batería ligeramente más capaz que, en estas cifras, es muy significativo.
Momento de sacar la calculadora
Traducido en costes de carga completa (en un enchufe doméstico llevará más de una noche, sobre todo el Hyundi Kona eléctrico), el Hyundai Kona eléctrico recarga completamente por 5,88 euros, mientras que el Volkswagen e-Golf lo hace por 5,37 euros (coste estimado de 0,15 €/kWh). A partir de ahí, echa cuentas de lo que te puede cundir esta energía según el modo y estilo de conducción.
En todo caso, si nos fijamos en el Volkswagen e-Golf sus cualidades dinámicas están muy por encima de este acotado alcance. Aunque se nota más peso que otras versiones de la gama (apenas perceptible en una utilización normal), su comportamiento es muy solvente. La dirección tiene mejor tacto que la del coreano, si bien el pedal del freno, por su esponjosidad en el primer recorrido, gusta menos.
En esto, el Hyundai Kona presenta una frenada más modulable, se mueve realmente bien en cualquier ambiente (salvo en campo, porque sus aptitudes de todocamino son limitadas), y si cabe, tracciona algo mejor.
Ojo aquí, porque con la inmediata respuesta de las mecánicas acelerando con ganas, sobre todo a coche parado, es fácil perder rueda (patinar, vamos) con cualquiera de ellos.
Más: la dotación de serie es completa en uno y otro, con soluciones aerodinámicas (llantas…) y complementos tipo navegador, etc. El Hyundai Kona incluso se desmarca del resto de la gama con una consola diferente, muy elevada, ergonómica y accesible; porta los botones del cambio automático.
Ojo a los descuentos
En resumen, no son asequibles (casi 40.000 euros), aunque debes tener en cuenta que hay importantes bonificaciones y ayudas de la administración para rebajar la tarifa de estos competentes eléctricos.
Después, considera hacerte con un wallbox para poner en casa y que la recarga no se convierta en un larguísimo suplicio.
Fotos: Paloma Soria
Ficha técnica Volkswagen e-Golf
Tipo de motor | Eléctrico |
Potencia | 136 CV |
Par Máximo | 290 Nm |
Batería | Iones de litio, 35,8 kWh |
Autonomía | 230 km (ciclo WLTP) 300 km (NEDC) |
Tiempo de carga | 4:15 h (toma de 7,2 kW) 45 min (carga rápida 40 kW) |
Velocidad máxima | 150 km/h |
Aceleración | 9,6 s (0 a 100 km/h) |
Consumo | 15,8 kWh/100 km |
Medidas | 4.270 / 1.799 / 1.482 mm |
Neumáticos | 205 / 55 R16 |
Peso en vacío | 1.615 kg |
Maletero | 341 l |
Precio | 39.460 euros |
Gama desde | 37.040 euros (con descuento) |
Lanzamiento | Marzo de 2017 |
Equipamiento Volkswagen e-Golf
De serie: Frenada de emergencia con detección de peatones; control de crucero adaptativo con limitador; asistente de arranque en pendiente; detector de fatiga; bloqueo electrónico de diferencial XDS; selector de modos de conducción; llantas de 16 pulgadas; faros de LED; luz de giro; sensores de aparcamiento delanteros y traseros; retrovisor interior antideslumbramiento; climatizador bizona; tapicería de tela; sistema multimedia Discover Pro con navegador y pantalla táctil de 9,2 pulgadas; instrumentación digital; App Connect con Apple CarPlay y Android Auto; llamada de emergencia.
Opcional: Pintura Blanco Puro (240 euros); pintura metalizada (545 euros); tapicería de cuero Vienna con asientos deportivos (2.525 euros); cámara trasera (260 euros); bomba de calor (960 euros); faros LED adaptativos (345 euros); carga de móvil inalámbrica (395 euros); pack conducción semi-autónoma: incluye reconocimiento de señales, asistente de atascos y salida de aparcamiento, control de carril y ángulo muerto (900 euros); radio digital (225 euros); asistente de aparcamiento (175 euros), apertura y arranque sin llave (355 euros).
Ficha técnica Hyundai Kona Eléctrico 100 kW Tecno 39,2 kWh
Tipo de motor | Eléctrico |
Potencia | 136 CV |
Par máximo | 395 Nm |
Batería | Iones de litio, 39,2 kWh |
Autonomía | 289 km (ciclo WLTP) 345 (ciclo NEDC) |
Tiempo de carga | 6:10 h (toma de 7,2 kW); 54 min (80% en carga rápida 100 kW) |
Velocidad máxima | 155 km/h |
Aceleración | 9,7 s (0 a 100 km/h) |
Consumo | 15,4 kWh/100 km |
Medidas | 4.180 / 1.800 / 1.570 mm |
Neumáticos | 215 / 55 R17 |
Peso en vacío | 1.610 kg |
Maletero | 332 l |
Precio | 39.500 euros |
Gama Desde | 36.100 euros (con descuento) |
Lanzamiento | Diciembre de 2018 |
Equipamiento Hyundai Kona Eléctrico 100 kW Tecno 39,2 kWh
De serie: Control de crucero; detector de fatiga; asistente de mantenimiento de carril; asistente de arranque en pendiente; frenada de emergencia automática; aviso de colisión frontal; selector de modos de conducción; llantas de 17 pulgadas; faros Full LED; asistente de luces de carretera; sensores de aparcamiento traseros con cámara; climatizador bizona; levas en volante para control de frenada regenerativa; tapicería de tela y cuero; asiento trasero abatible 60/40; cargador inalámbrico para el móvil; Head-up display; instrumentación digital de 7 pulgadas; sistema multimedia con navegador y pantalla táctil de 8,0 pulgadas; suscripción servicios TomTom Live 7 años; radio digital; Apple CarPlay y Android Auto; equipo de sonido Premium Krell con 8 altavoces; Bluetooth; conexión auxiliar y USB.
Opcional: Pintura Galaxy Gray (sin coste); pintura metalizada (480 euros).