Comparativa de compactos líderes: Ford Focus vs Renault Mégane, juego de tronos

Hasta hace poco, los compactos eran el segmento de moda. Modelos como el Ford Focus o el Renault Mégane siguen batallando para mantenerlos a flote.

El cetro de los compactos se ha dirimido en las últimas décadas entre modelos como el Ford Focus y el Renault Mégane. En la actualidad, las ventas las copan versiones de gasolina como las que enfrentamos en estas páginas.

Los compactos siguen siendo en buena medida los reyes del mercado, aunque la tendencia dicta que ahora son mucho más populares las versiones de gasolina que las diésel. Por lo tanto, hemos seleccionado el Ford Focus 1.5 Ecoboost de 150 CV para enfrentarlo al Renault Mégane 1.3 TCe de 140 CV. Tanto uno como otro cuentan con cambio automático, de ocho velocidades el primero de siete el segundo.

En el caso de Ford Focus, probamos su acabado más deportivo, el ST Line, mientras que el Renault Mégane es la versión Bose, la más equipada de la familia. Con estos mimbres, es lógico que exteriormente el Ford Focus resulte más llamativo, por cuanto el acabado ST Line incluye paragolpes, taloneras, alerón y difusor específicos.

Esto no significa en absoluto que el Renault Mégane no disponga de sus propias armas, pues es un automóvil que sigue conservando un enorme atractivo, especialmente en esta versión Bose, que luce varios elementos cromados en una carrocería que sigue plenamente vigente.

Polos opuestos

Pese a competir en el mismo segmento, los habitáculos del Ford Focus y el Renault Mégane no podrían ser más diferentes. El modelo de Ford Focus mezcla a dosis exactas tradición y modernidad, pues cuenta con elementos clásicos como la relojería y la climatización analógicas, junto a otros más modernos como la ruleta para el cambio tipo Land Rover, el excelente equipo de infoentretenimiento o el cargador por inducción Qi. Por acabados y materiales está un punto por encima de su rival en estas páginas.

Además, es uno de esos automóviles en los que uno se siente cómodo casi de inmediato, con una ergonomía perfectamente estudiada y sin soluciones imaginativas pero poco intuitivas. Los huecos porta objetos y vaciabolsillos son mejores que en modelo francés.

Prêt-à-porter

Cuando nos subimos al Renault Mégane encontramos un mundo de contrastes, con un diseño interior muy atractivo que se ve penalizado por la calidad de algunos plásticos, que no acaban de dar la talla. Otro tanto sucede con la pantalla del equipo multimedia, perfectamente integrada en el salpicadero y con una excelente resolución, pero con un manejo no todo lo bueno que sería deseable.

Tampoco la climatización digital, excesivamente compleja, termina de convencer, pero en cambio, el cuadro de mandos digital resulta mucho más moderno que el del Ford Focus. La sensación final que deja es menos convincente que la de su rival.

Si hablamos de los espacios interiores, las plazas delanteras son muy similares en ambos, mientras que tanto uno como otro disponen de espacio suficiente para adultos de hasta 1,80 metros en las plazas traseras.

Aquí el Ford Focus impone su superior batalla (2.700 mm frente a 2.669 en el Renault) para ofrecer un mejor espacio para las piernas, aunque a cambio cede 9 litros de capacidad del maletero (384 litros en el Renault Mégane y 375 en el Ford Focus). Eso sí, el modelo del óvalo cuenta con una boca de carga más baja especialmente útil.

Siguen las diferencias

Una vez nos ponemos a los mandos, las diferencias entre nuestros protagonistas no hacen sino acentuarse. El Ford Focus tiene un tacto mucho más firme, presente incluso en el mullido de los propios asientos.

Desde el principio muestra más mordiente que el Renault Mégane, en parte porque cuenta con 10 CV extra de potencia, pero que es culpa de la propia filosofía del coche. Es algo que se nota en detalles como la presencia de levas tras el volante para actuar el cambio, elemento que su rival no ofrece ni como opción.

La electrónica entra en escena

Se conforma con tres modos de conducción: Normal, Eco y Sport, que modifican notablemente el comportamiento del coche. De hecho, en modo Sport, permite circular muy rápido y afrontar zonas reviradas a buen ritmo, aprovechando las bondades de un chasis que es una delicia y que tiene un tacto decididamente deportivo.

Con 150 CV, hay potencia de sobra incluso para circular bastante cargados. El Renault Mégane dedica sus esfuerzos al confort, no a las prestaciones o las sensaciones al volante, ni siquiera el modo de conducción más deportivo de los cinco con los que cuenta: Comfort, Sport, Eco, Neutral y Personal.

Como ya sucede con el Ford Focus, el mullido blando de los asientos es la pista definitiva de por dónde van los tiros. Es un coche muy agradable de usar, pero que no invita a correr, sino que está pensado para desplazarse con toda la familia de la manera más confortable posible.

En este caso, se nota que anda un poco menos, especialmente en la parte baja del cuentavueltas, aunque posiblemente sea debido a su déficit de potencia con respecto a su rival. A la hora de mirar los consumos, esto se convierte en una ventaja, pues gasta medio litro menos en ciclo mixto: 6,4 litros a los 100 kilómetros del Renault Mégane frente a los 6,9 del Ford Focus. En cualquier caso, cifras muy buenas para motores de gasolina de este caballaje.

Precios similares

La batalla en segmento de los compactos es tal, que incluso marcas como Ford y Renault han entrado de lleno de la pelea de los descuentos, hasta el punto de que, aunque el precio de partida de ambos es de 27.000 euros, el Ford Focus está disponible por 20.911 euros mientras que el Renault Mégane rebaja esa cifra hasta los 20.232 euros. Lo cierto es que es difícil ofrecer más por menos precio.

Fotos: Paloma Soria

Ficha técnica Ford Focus ST Line 5P 1.5 Ecoboost 150 CV A8

Equipamiento Ford Focus ST Line 5P 1.5 Ecoboost 150 CV A8

De Serie: Pantalla Táctil 8”; SYNC Radio BT + Applink; pantalla TFT 4,2” color; consola central con posavasos; MyKey Gen2 con llave de repuesto; protector de estribo ST Line; volante deportivo ST Line; palanca de cambios en aluminio; techo interior negro; control de crucero con limitador de velocidad; suspensión deportiva; llantas de aleación ST Line; parachoques delantero y trasero ST Line; inserciones ST Line en parrilla; difusor de parachoques trasero ST Line; faros antiniebla LED delanteros con función cornering; bisel de los faros en negro; tubo de escape doble pulido y barras de techo en negro SW.

Opciones: Tapicería piel parcial negro Ebony con costura roja (750 euros); llantas aleación 16 pulgadas (190 euros); llantas aleación 17 pulgadas (226 euros); llantas aleación 18 euros (294 euros); cristales privacidad (100 euros); Paquete Diseño (900 euros); Paquete Diseño Premium (1.400 euros); llantas de aleación 18 pulgadas ST Line (600 euros); rueda de repuesto convencional (75 euros); Paquete Tecnológico (400 euros); head up display (400 euros); cámara de visión trasera (250 euros); faros LED (750 euros); Paquete Parking (500 euros); Paquete Familiar (260 euros); Paquete ST Line (500 euros); techo panorámico (1.100 euros); cargador inalámbrico (150 euros); Paquete Invierno (350 euros); Paquete Confort (375 euros); alarma perimétrica (285 euros) y doble bandeja maletero (50 euros).

Ficha técnica Renault Mégane Bose 1.3 TCe 140 CV EDC

Equipamiento Renault Mégane Bose 1.3 TCe 140 CV EDC

De serie: Tapicería mixta tejido /Tep negro específica Bose; alerta por cambio involuntario de carril; ayuda a la frenada de emergencia (SAFE); alerta de exceso de velocidad con reconocimiento de señales de tráfico (para R-Link); control dinámico de trayectoria ESC con ayuda al arranque en pendiente; R-LINK 2 con pantalla táctil de 22,1cm (8,7”) con sonido premium BOSE; Apple CarPlay y Android Auto; climatizador automático bi-zona; asiento conductor regulación lumbar & pasajero con regulación en altura; elevalunas eléctricos; regulador-limitador de velocidad; encendido automático de luces y sensor de lluvia; luces de día LED; ayuda al aparcamiento delantero y trasero + cámara visión trasera y volante de cuero Nappa.

Opciones: Llantas de aleación de 18 pulgadas Grand Tour (468 euros); Pack Safety con frenada de emergencia asistida, regulador de velocidad adaptativo y alerta de distancia de seguridad (676 euros); Pack Easy Parking con detector de ángulo muerto, ayuda al aparcamiento delantera y trasera + cámara visión trasera + Easy park assist (624 euros); asientos delanteros calefactables (312 t); head-up display (364 euros); techo eléctrico panorámico (935 euros); faros Full LED (727 euros) y rueda de emergencia (135 euros).