¿Recuerdas el Maserati MC-12? Sí, era aquél superdeportivo basado en el Ferrari Enzo, coetáneos los dos, significaban la máxima expresión de tecnología y prestaciones llegada desde Italia. Ahora solo Ferrari tiene presencia en la máxima categoría con el LaFerrari, y esperamos que Maserati nos sorprenda con un superdeportivo similar. Parece que no ocurrirá, pero este Maserati MC-63 es un perfecto ejemplo de por qué lo necesitamos.
Solo un proyecto
Es una pena que este prototipo no llegue desde Maserati, pero hay que aplaudir el trabajo de Andrea Ortile, que desde Italia prefigura cómo podría ser el LaFerrari de la marca del Tridente. Se basa, según su autor, en el Tipo 63 “Birdcage” de 1961, del que recibe el nombre. Y nos le creemos, solo hay que fijarse en los pasos de rueda tan abultados que luce, y que dan garra a un diseño dominado también por una cúpula que da forma al habitáculo.
Hay mucho del “Birdcage”, pero también del Alfieri, uno de los últimos ejemplos de la nueva línea de la marca italiana. De ahí coge la parrilla delantera y los afilados faros delanteros. Claro, que también coge la inspiración para la trasera, donde la aerodinámica juega un papel fundamental a través de un difusor muy pronunciado, destacando, eso sí, la ausencia de grandes alerones fijos como sí ocurría con el antiguo pero no menos impresionante MC-12.
Como no es un trabajo de Maserati, es complicado hablar de cifras si mencionamos la mecánica. En todo caso, acudiendo a la misma fórmula que se usó antaño, emplearía el mismo conjunto híbrido del LaFerrari, es decir, un total de 963 CV de potencia y 900 Nm de par.