El Porsche Macan Turbo se postula como la variante más prestacional del SUV compacto gracias a una portentosa mecánica.
La firma de Stuttgart presenta la variante más atractiva, por prestacional, de su SUV compacto. El Porsche Macan Turbo convencerá al exprimir el nuevo motor de 2,9 litros y 6 cilindros en V hasta los 440 CV. Sí, un todocamino puede mirar ahora de tú a tú al Porsche Carrera 4S Coupé (450 CV).
El nuevo modelo es una obra de ingeniería pues logra un 10 % más de potencia con un 20 % menos de cilindrada. Y sus prestaciones quedan fuera de toda duda, en parte por la presencia de la tracción total y del cambio automático PDK de doble embrague y 7 relaciones. Es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en solo 4,3segundos (tres décimas menos que en la versión anterior) y sitúa su punta de velocidad en los 270 km/h (4 km/h más que hasta ahora).
El modelo se verá por primera vez en el Salón de Frankfurt (del 10 al 22 de septiembre) aunque ya se puede adquirir en los concesionarios oficiales con un precio de partida de 106.372 euros.
Diseño propio
Cuando la segunda generación del Porsche Macan apareció se definió como un pequeño Porsche Cayenne, aunque esta variante turboalimentada se podría comparar más con alguno de los Porsche 911 existentes. Tiene identidad propia pues son muchos los rasgos estéticos que le diferencian del modelo convencional.
Este Porsche Macan Turbo cuenta con un frontal específico con tres grandes tomas de aire y luces de tipo Led (Porsche Dynamic Light System), luce faldones laterales y los espejos exteriores (Sport Design) son del color de la carrocería, mientras que el alerón en el techo es fijo con diseño de doble ala. A esto suma un escape deportivo con una doble cola de escape plateada y unas llantas de 20 pulgadas.
Un motor conocido
Aunque antes decíamos que esta variante se podría comparar con alguna de las variantes del Porsche 911, lo cierto es que el motor 2.9 V6 de 440 CV ya está presente en la familia del Porsche Cayenne y del Porsche Panamera. En el caso del deportivo, se sigue apostando por los motores de 6 cilindros en disposición bóxer.
En este caso, el sistema de sobrealimentación se ha ubicado en posición central, los dos turbo compresores se colocan en el centro de la V mientras que el colector de escape refrigerado se ha integrado en la culata para una combustión más eficiente. Esto logra una respuesta realmente rápida.
Así, establece el par máximo en los 550 Nm entre los 1.800 y los 5.600 rpm mientras que el consumo de gasolina se eleva a los 9,8 l/100 km.
Buena parte de los parabienes que recibe por esta respuesta se debe a la tecnología que le acompaña. Así, de serie llega con frenos de altas prestaciones (Porsche Surface Coated Brake, PSCB) que están recubiertos de tugsteno, mejoran la eficacia y evitan hasta un 90 % del polvo de fricción que suelta en los frenos convencionales. Las pinzas de freno, por su parte, están decoradas de color blanco.
Además, se presenta con suspensión neumática opcional con altura variable, nuevos amortiguadores hidráulicos, diferencial Porsche Torque Vectoring Plus y frenos carbocerámicos (PCCB).
Deportivo, cómodo y muy equipado
En el apartado del equipamiento destacan los nuevos asientos deportivos de cuero, con ajuste eléctrico de 18 posiciones; pantalla táctil de 10,9 pulgadas en el centro del salpicadero y equipo de sonido firmado por Bose con 14 altavoces. Este nuevo sistema de infoentretenimiento cuenta con navegación online, información del tráfico en tiempo real y que se puede controlar mediante comandos fónicos. Además, se puede sincronizar con la aplicación para móviles Porsche Connect.
Entre las opciones se incluye el volante deportivo GT con calefacción, base de carga para teléfonos móviles con carga inductiva, parabrisas calefactado, ionizador para mejorar la calidad del aire, el nuevo asistente de atascos y el control de crucero adaptativo que no solo mantiene la velocidad indicada con la distancia de seguridad requerida sino que, además, puede adaptar esta velocidad a la del vehículo precedente hasta el punto de llegar a parar y reemprender la marcha cuando las condiciones del tráfico así lo permitan.