A estas alturas, todos, aficionados y profesionales, sabemos que el chino es uno de los mercados más importantes del mundo. Lo es, primero, por el elevado número de potenciales clientes y, segundo, por el crecimiento económico que el país lleva experimentando desde hace años. Esta coyuntura explica que las marcas se adapten a los gustos de los chinos. Por eso, Porsche ha comenzado a vender el 718 Boxster y el 718 Cayman capados a 250 CV.
No hay cifras oficiales respecto a las prestaciones que otorgan los coches con esta rebaja de potencia. Los de 300 CV logran 275 km/h de velocidad máxima y, si van equipados con la transmisión automatizada con doble embrague “PDK“, 4,9 segundos en la aceleración de 0 a 100 km/h.
Como bien sabrás, la gran diferencia entre los dos deportivos estriba en la carrocería. El 718 Boxster presenta una clásica capota de lona de accionamiento eléctrico, mientras que el 718 Cayman opta por un techo cerrado. Queda en manos de los clientes la decisión de uno u otro. En todo caso, el acierto está más que garantizado.
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