Texto: J. Miguel Quintana
Desde su estreno comercial en 1978, el Volkswagen Caddy ha vendido en todo el mundo más de un millón y medio de unidades. Ahora, llega la cuarta generación, en la que la marca alemana ha puesto toda la carne en el asador, para enfrentarse a una fuerte competencia, compuesta por Citroën Berlingo, Peugeot Partner, Fiat Dobló, Ford Tourneo Connect…
La primera impresión es que estamos ante una evolución estética del modelo anterior, con líneas más horizontales y las mismas dimensiones exteriores. Sin embargo, los cambios más profundos están en el interior. Conserva la plataforma de la versión precedente, aunque se ha modificado la puesta a punto de la dirección y la suspensión, con la idea de resultar ágil en ciudad y más cómodo en zonas bacheadas. Respecto al eje trasero rígido, suspendido por ballestas, resulta menos agradable al circular con uno o dos pasajeros, pues está diseñado para soportar mayores cargas.
Además de la versión comercial “Furgón”, con dos plazas y sin ventanillas laterales, también está disponible en configuración “Kombi”, con cinco plazas y ventanillas, “Trendline”, un auténtico familiar con hasta siete plazas, y “Comfortline”, con un completo equipamiento, que incluye, entre otros, el control de velocidad de crucero adaptativo “ACC”. Todas están disponibles en dos tamaños de carrocería: “Compacta”, de 4,40 metros de longitud, y “Maxi”, de 4,87 metros, en la que el espacio de carga pasa de 1,78 metros a 2,25.
Por otra parte, entre la competencia es difícil encontrar un habitáculo mejor diseñado y acabado, con unas líneas limpias y unos materiales plásticos duros, pero bien ajustados. Además, incorpora nuevos sistemas de infoentretenimiento, más allá del sistema de sonido y la conexión Bluetooth, como el navegador o la conectividad con teléfonos móviles inteligentes, a través de la pantalla, en las versiones más equipadas.
Salvo la versión con motor 1.4 TSI, de 125 CV, la gama está compuesta por cuatro variantes turbodiésel, de 75, 102, 122 y 150 CV, todas basadas en el propulsor 2.0 TDI. Suaves de funcionamiento, presumen de ser muy eficientes. Gracias a medidas como el sistema de parada y arranque automáticos del motor Start/Stop, reducen el consumo en un veinte por ciento y cumplen con la normativa de emisiones Euro 6. Sobre todo, destaca la variante “BlueMotion”, asociada a la motorización de 102 CV, con un consumo homologado de solo 4,1 litros.
Las cajas de cambio pueden ser manuales, de cinco o seis marchas, o automáticas de doble embrague “DSG”, de seis o siete. La versión de 122 CV se asocia, exclusivamente, a la tracción total “4MOTION”.
Aún no han anunciado todos los precios ni datos técnicos, pero si no tienes prejuicios estéticos y buscas un vehículo práctico en el que quepa de todo, el nuevo Caddy llegará en julio, desde 16.430 €.
Aquí te dejamos el vídeo de la presentación internacional del nuevo Volkswagen Caddy.