Aunque parezca que es inútil poner el parasol por no quitar demasiado calor, tiene mucha más importancia de lo que parece.
En plena ola de calor como la que nos encontramos, muchas son las recomendaciones que nos encontramos. No solo para combatir las altas temperaturas nosotros mismos, también para proteger nuestros coches de ellas. Y es que nuestra salud está más que ligada a estas cuestiones.
Y sí, usar un parasol cuando dejamos nuestro coche aparcado sirve para mucho más de lo que crees. Al igual que es bueno llevar laminadas las lunas traseras del vehículo. Con el simple gesto de colocar este famoso objeto en la luna delantera antes de bajar del coche, sufriremos importantes consecuencias cuando volvamos.
El parasol ayuda a disminuir el calor
Para empezar, aunque hayamos tenido la gran suerte de aparcar en la sombra, si usamos el parasol evitaremos que la temperatura del interior del coche sea tan elevada; te recordamos que, según un estudio de las universidades estadounidenses de San Diego y Arizona, dejar aparcado un vehículo un día en el que el termómetro marque los 37ºC en la calle supone que en el interior pueden superarse los 50ºC.
De esta forma, usaremos menos el aire acondicionado, el cual solemos poner al máximo cuando arrancamos el coche. Pero no solo eso, ya que, como bien explican los especialistas de Alvatowash, existen otros motivos de peso para ello. Por ejemplo, que evitaremos que los plásticos del interior del coche (presentes en la mayoría de componentes del habitáculo) se deterioren.
Protege el aire que respiras
Y otro motivo importante, esta vez relacionado con tu salud. Un parasol, sea de cartón o plástico, reduce un 40% los daños que provoca el sol en el interior del vehículo. Entre ellos, el benceno que se desprende cuando los plásticos del habitáculo se ven sometidos a altas temperaturas.
En condiciones normales, de esta toxina se suelen liberar unos 600 mg; si el coche está sin protección al sol, puede aumentar hasta los 3.000 mg. Así, siempre es recomendable bajar las ventanillas nada más subir al vehículo para ventilar su interior. En este caso, no sirve encender el aire acondicionado para depurar el coche.