Opel ha confirmado que no estará en el Salón del Automóvil de Ginebra que se celebrará del 8 al 18 del próximo mes de marzo. La medida ha sido tomada después de que el Grupo PSA, que compró Opel/Vauxhall el pasado marzo de 2017, esté presionando a la marca para recortar costes.
La necesidad de reducir los gastos viene precedida por varios años de muchas pérdidas, una situación que PSA quiere revertir y que ha llevado a Opel a decidir ahorrarse los costes de la participación en un gran salón como es el de Ginebra, según apuntan desde Automotive News Europe.
La noticia surge justo después de que Opel/Vauxhall anunciara la paralización de la producción del nuevo Corsa en Figueruelas
Tras un año 2017 intenso en el que debutaron el Grandland X y el Crossland X, según Automotive News Europe este año no es un periodo de grandes lanzamientos de la marca, por lo que cobraría algo más de sentido el que no estén en la cita suiza.
Un portavoz de PSA ha afirmado a las mismas fuentes que los salones del automóvil son “solo una herramienta de marketing más” y que si no existen nuevos productos, las marcas “no estarán allí”. Además, ha confirmado también la ausencia de DS al Salón y la asistencia de Citroën y Peugeot.
Suele ser frecuente que algunas marcas no acudan a los grandes salones, ya ocurrió con Peugeot o DS en el de Fráncfort 2017
Por otro lado, un portavoz de Opel ha explicado a la agencia de noticias alemana DPA que Opel se centrará en sus propios eventos y que solo acudirá a los grandes salones cuando haya “negocios y razones de marketing para ello”.
El plan de negocio de Opel, establecido por PSA, busca como objetivo lograr un margen de beneficio del 2 % para el año 2020 a través de medidas para ser más eficiente y reducir los costes. En este sentido, PSA se ha encargado de reducir las horas de trabajo en las fábricas alemanas de Opel y ha reducido empleos en la planta de Vauxhall en Ellesmere Port (Inglaterra).