La marca taiwanesa apuesta por el público femenino con su nueva gama urbana. El pasado lunes, presentaron su nuevo Filly 125. Un modelo de scooter que pretende ser el primer vehículo KYMCO con más compradoras que compradores en el mercado. Es más, según las previsiones, esperan que las mujeres ocupen el 60% de la cuota, en los próximos años.
Se trata de una estrategia ambiciosa, basada en el éxito que han tenido sus dos últimos vehículos de la gama 125 cc (el Agility City y el Miller) entre las usuarias. Según los últimos datos, el 20 % de las ventas de scooter pertenecen a las mujeres y, por ello, han decidido crear nuevos modelos que se ajusten a sus demandas.
A pesar de que la nueva apuesta de KYMCO presenta un tamaño más reducido, sabe mantener la atractiva esencia de los escúteres, ofreciendo una estética elegante y apostando por líneas más suaves y redondeadas. Han cuidado todos los detalles, presenta solo 115 kilos de peso y han reducido la distancia del asiento respecto al suelo (765 mm) para ganar en comodidad. Además, presenta grandes grupos ópticos, tanto en la parte delantera como en la trasera, aumentando la visibilidad en la carretera.
Si tenemos en cuenta las prestaciones, ofrece un tablero digital más moderno, apertura del depósito y del cofre desde la llave de contacto, gancho para el bolso y un puerto de carga USB, entre otros. Destaca por su suelo plano y, además, cuenta con un tirador bajo el asiento para abrir las estriberas. Es un modelo que está disponible en tres gamas de colores diferentes para ajustarse a todos los gustos. Estos son; blanco perlado con asiento rojo; gris con asiento rojo o azul mate con asiento negro.
En cuanto a su mecánica, presenta un motor de 2 válvulas diseñado ex profeso para este modelo. Es muy silencioso y cumple sobradamente con la normativa Euro 4 anti contaminación. Destaca por tener un sistema de distribución que ayuda a reducir el consumo a 2,4 litros por cada 100 kilómetros. Y además, es el primer scooter de KYMCO que trae instalado el sistema ABS de frenada en el tren delantero. Algo que le aporta un valor extra en términos de seguridad y que le permite ajustarse a cualquier bolsillo.
Por tanto, hablamos de un vehículo que cumple con los requisitos estéticos, es fácil de manejar y, al mismo tiempo, proporciona buenos resultados en términos de velocidad y potencia. Por el momento, se ha diseñado para comercializarse en el mercado español y su precio gira en torno a los 2.699 €. Sin duda, una opción algo más cara que el Miller o el Like, pero que marca una gran diferencia en mejoras.