La compañía estudia el propulsor que tendrá el nuevo DeLorean
Sí, habéis leído bien. Hace unos meses os contamos que DeLorean planeaba volver al mercado , y aquellos primeros rumores no han quedado en dique seco, sino que continúan, y las última noticias que han surgido desde DeLorean Motor es que el nuevo DeLorean DMC-12 que pretenden lanzar en el segundo trimestre de 2017 incorporará mejoras a las que obliga el paso del tiempo y una evolución mecánica, entre ellas en el motor, que rendirá más 260 CV.
Variedad entre la que elegir
Por el momento no está clara la decisión final sobre la motorización que llevará el vehículo que se hizo legendario por su extraño diseño, apertura de puertas al estilo “alas de gaviota” pero sobre todo por viajar en el tiempo en la saga “Regreso al futuro”. Según han señalado fuentes de la compañía a la revista Autoevolution el rendimiento pretendido es superior al V6 de 2,85 litros y 130 CV de origen Renault, Peugeot y Volvo que montó su antecesor.
Los finalistas son el 2.0 LTG de General Motors que utiliza la última versión del Chevrolet Camaro, y el 2.3 EcoBoost de Ford que monta la versión light del Mustang y el Focus RS. De las mismas compañías también se han considerado el 3.7 Ti-VCT V6 de Ford y el 3.6 LGX V6 de General Motor.
Pocos datos nuevos se conocen por el momento sobre el renacimiento del nuevo DeLorean DMC-12, tan solo que los planes de producción pasan por unos 50 al año, aunque los primeros doces meses naturales desde su lanzamiento será de solo 12 unidades.
Historia particular
La leyenda del cine ha tapado la propia historia de una marca particular en sí misma, por rocambolesca y por el modo en el que acabó, propio de una película de serie B. La compañía fue fundada por John De Lorean, un alto directivo de General Motor que salió por la puerta de atrás de la compañía fabricante de automóviles más grande del momento.
En su palmarés contaba con varias medallas, y alguna de grandes dimensiones, como la de haber sido el creador del Pontiac GTO, es decir el primero de los “muscle cars” un tipo de vehículo que fue un éxito de ventas y con una gran afición por todo el mundo, y eso que solo se comercializaron en Estados Unidos. Y hablamos en plural porque la aparición del GTO obligó al resto de marcas a lanzar un modelo equivalente en tamaño, prestaciones y deportividad, motivo por el que el mercado se llenó de V8.
Sin embargo, su personalidad histriónica, su ego y alguna creación que no tuvo el éxito esperado le llevó a la puerta de salida de la compañía. Pero a la de atrás.
Tras verse en la calle, y con una carpeta llena de lo que él creía que eran buenas ideas, se decidió a montar su propia compañía. Contaba con amigos en la industria y el sector de los negocios por lo que no tuvo problemas en encontrar apoyo financiación.
Variedad de opciones
En el momento de montar la primera fábrica se produjo esa habitual competición entre Estados, ciudades, regiones y administraciones que suele haber cuando existe la posibilidad de crear varios miles de empleos. Le llegaron varias oportunidades de construir a coste cero y facilidades para la instalación, y de todas, la opción que le convenció fue la de Irlanda de Norte. Sí, un pequeño pueblo (Dunmurry) cerca de la Belfast que con más crudeza estaba viviendo el enfrentamiento entre el IRA y el gobierno británico.
Sobre el papel, el vehículo tenía argumentos para convencer al comprador. En la era de la crisis de petróleo tenía un coche con un motor V6 con potencia (130 CV) y consumo contenido y un diseño que firmaba el propio Giugiaro.
Sin embargo, las cuentas no salían como esperaba, por lo necesitó buscar nuevos canales de financiación. Y no los encontró. Bueno, sí, pero no eran legales. A finales de 1982, John De Lorean fue arrestado en el aeropuerto de Los Angeles (Estados Unidos) cuando intentaba introducir en el país una maleta con 24 millones de euros en cocaína.
El encarcelamiento de Jonh, que quedó libre al tiempo por un fallo en el procedimiento, y la falta de rentabilidad de la compañía acabaron con la compañía De Lorean. Y quizá por esto hizo que sus vehículos hayan permanecido a lo largo del tiempo como iconos del cine y de la historia de la automoción.