La DGT ha vuelvo a alertar de un intento de estafa mediante la modalidad de pishing, es decir, un correo electrónico falso que puede pasar por verdadero y que te alertaba de una multa pendiente de pago. En este caso, y como ya ha sucedido en otras ocasiones, esta sanción es falsa y solo pretende robar los datos privados de la víctima, entre los que se incluyen los de acceso a su cuenta bancaria, así como introducir virus en su dispositivo electrónico.
El correo enviado puede pasar por verdadero e inducir al engaño pues utiliza los símbolos de la DGT y del Ministerio del Interior. Sin embargo, si uno lo lee con detenimiento, puede encontrar alguna falta ortográfica y de consonancia, además de que se encuentra un tipo de letra diferente al que suele utilizar Tráfico en sus comunicados, de un tamaño superior al habitual y una manera de escribir que no es la habitual de la DGT.
Algo que deben tener claro los conductores de nuestro país, y que ya ha dicho en varias ocasiones la DGT, es que esta institución no envía correos electrónicos para realizar sus notificaciones oficiales como primera advertencia de una sanción o por iniciativa propia. Para ello se sirve de la aplicación oficial, MiDGT, que puso en marcha hace unos meses, y, sobre todo, de correo ordinario.
Solo emplea mensajes de texto en teléfonos móviles y correos electrónicos a aquellos que se han dado de alta en el servicio de notificaciones electrónicas. Para comprobar nuestra sanción hay que dirigirse a la sede electrónica de la DGT donde hay que iniciar sesión con nuestro usuario y contraseña. Solo en ese caso podremos ver nuestra sanción y proceder al modo de pago, nunca enviará un enlace a esta sanción para solicitar nuestros datos bancarios.
La DGT dispone de tres canales oficiales para hacer las consultas relativas a las multas pendientes de pago. Cuenta con un teléfono gratuito, el 060, desde donde se podrán consultar las sanciones pendientes y se podrá proceder a su pago.
También se podrán revisar desde la sede electrónica de la DGT, desde donde también se podrá pagar (también se pueden realizar otras consultas y gestiones). Para acceder necesitamos identificarnos con el DNI electrónico, un certificado electrónico y registrarnos con un usuario y contraseña.
El último método es la aplicación miDGT, una aplicación que se puso en marcha hace unos meses y donde la DGT pretende incorporar nuestra documentación y la de los vehículos que utilicemos, aunque ya ha surgido alguna polémica al respecto.