Son tres más que en el 2022 a lo que hay que sumar casi 5.000 heridos hospitalizados. 138 de ellos no llevaban puesto el cinturón de seguridad.
El 2023 ha quedado ya atrás para muchas cosas pero nunca se pueden dejar en el olvido los fallecidos en carretera. Menos cuando se han registrado unas cifras tan negativas como la de los pasados 12 meses. Porque el conjunto del año se cerró con nada menos que 1.145 fallecidos, es decir, solo tres menos que en 2022; cifra a la que hay que sumar un total de 4.495 heridos que fueron trasladados al hospital. Si comparamos los datos con el 2019, el resultado es más preocupante pues se ha aumentado la siniestralidad en 47 personas.
Asimismo, sigue siendo preocupante el número de personas que perdieron la vida en carreteras convencionales, 849, lo que representa el 74% del total, 21 más respecto al año anterior. Además, cabe destacar los datos de siniestralidad por salidas de vía, causantes del 42% de fallecimientos. Por eso, desde organismos como la Fundación RACE reiteran que resulta imprescindible adoptar una estrategia consensuada entre las organizaciones, asociaciones y administraciones que conforman el ecosistema de la movilidad y la seguridad vial para reducir estas cifras.
La falta de mantenimiento y la escasa inversión en este tipo de infraestructuras no ayuda a la reducción de estas cifras. Pero, además, el incremento de impuestos por el uso de las autopistas de peaje (que ha comenzado a aplicarse el 1 de enero) supone una nueva carga para el bolsillo de los conductores y, además, comporta un incremento del riesgo vial al obligar a muchos usuarios a buscar vías alternativas más peligrosas como las que conforman la red secundaria.
Además de los siniestros ya comentados en carreteras convencionales; en vías de alta capacidad los fallecidos han disminuido respecto al año anterior, concretamente en 2023 murieron 296 personas, 24 menos que en 2022. La salida de la vía sigue siendo el tipo de siniestro que más fallecidos registra con 486 personas, el 42% del total de fallecidos, cifra similar a la del pasado año. Por el contrario, disminuyen un 9% los fallecidos en colisiones frontales.
En cuanto a los usuarios vulnerables fallecidos, han aumentado un 9%, situándose en 463, 38 más que el año anterior. Es especialmente alarmante la cifra de motoristas fallecidos, que se ha incrementado hasta alcanzar los 286, siendo el colectivo cuya siniestralidad es cada vez mayor desde hace más de una década. Asimismo, sigue siendo elevada la cifra de ocupantes que viajaban en turismo y furgoneta y no llevaban el cinturón de seguridad en el momento del accidente (138 en 2023 frente a 142 del año anterior), que 9 ciclistas y 8 motoristas no llevaban casco en el momento del siniestro, y el incremento de la mortalidad infantil, que registró 22 fallecidos, la segunda mayor cifra desde 2014.
Andalucía y Cataluña registran las mayores cifras de siniestralidad vial, en ambos casos se observa una disminución respecto al pasado año de un 12% (-26) y un 5% (-8) respectivamente. Por contra, La Rioja y la Comunidad Foral de Navarra registran las menores cifras con el 1% del total, con 11 y 13 fallecidos respectivamente. La evolución de la siniestralidad a lo largo de los 365 días del pasado año ha sido variable, tal y como ha relatado la propia DGT destacándola en varios datos que ayudan a entender el contexto:
A la vista de estas estadísticas, la política de seguridad vial del Ministerio del Interior este 2024 priorizará asuntos como la mortalidad de los motoristas, las salidas de la vía, las distracciones y somnolencia y la conducción bajo el efecto de alcohol y drogas.
El colectivo de motoristas es uno de los que más preocupa al Ministerio del Interior, que prepara varias medidas para intentar reducir su siniestralidad:
Además de estas medidas, la DGT va a revisar las normas reguladoras del tráfico como la reforma del Reglamento de Circulación para actualizar el Catálogo de Señales de Tráfico o impulsar la reforma de los Reglamentos de Conductores, Vehículos y de Circulación para la regulación del vehículo autónomo.