Con muelles helicoidales en lugar de ballestas detrás, el Nissan NP300 Navara 2016 se ha domesticado al mejorar la presentación del habitáculo y el equipamiento disponible. Su llegada es inminente.
Hace años que quedaron atrás los pick-up espartanos, con la tecnología básica, una estética poco cuidada y unos materiales de segunda o, en algunos casos, de tercera categoría. Ahora, el desarrollo de este tipo de vehículos lleva consigo un mayor trabajo cualitativo, como queda demostrado en el Nissan NP300 Navara 2016, cuya llegada al mercado español es inminente.
Disponible con las carrocerías “King Cab” y “Doble Cabina”, de cuatro y cinco plazas, respectivamente, su gran cambio en el bastidor es la sustitución de las ballestas traseras por unos muelles helicoidades, como elemento elástico del eje rígido. Con esta decisión, que ha supuesto una bajada de peso de 20 kilos, no se ha visto mermada la parte práctica del vehículo, pues posee una capacidad de carga de más de 1.000 kilos y otra de arrastre de 3.500.
El cliente debe decidir entre dos motores turbodiésel dCi con un bloque de 2,3 litros en común. Desarrollan 160 y 190 CV; el primero tiene un turbocompresor, mientras que el segundo cuenta con dos. La transmisión de serie es una manual de seis velocidades, aunque el más potente puede incorporar una automática de siete, de la que se desconoce su arquitectura.
Dotado de tracción total conectable y de marcha reductora, posee, además, un control de tracción, cuya gestión emula un control electrónico del diferencial. Por si fuera poco, también está presente un control de descenso de pendientes, para no temer inclinadas bajadas, y, opcionalmente, hay disponible un diferencial bloqueable mecánicamente. Con todos estos argumentos, es fácil pensar que el Nissan NP300 Navara 2016 puede atreverse con pasos “off road” imposibles para los actuales todocaminos.
En el momento que se inicie su comercialización, dispondra de cuatro acabados: “Visia”, “Acenta”, “N-Connecta” y “Tekna”. Entre las novedades de equipamiento, se encuentran el climatizador automático bizona, el asistente de frenada de emergencia automática en ciudad, los faros con tecnología de tipo LED, el control de velocidad de crucero y el sistema de visión periférica, entre otras tecnologías.
Una noticia relacionada con el Nissan NP300 Navara que acaba de desvelarse es que, el próximo 29 de febrero, se pondrá en marcha el segundo turno de producción del vehículo nipón en la planta de la marca japonesa en Barcelona. Esta medida, que implica unos doscientos cincuenta puestos de trabajo, supondrá el retorno de setenta y cinco empleados fijos discontinuos y la contratación de personal adicional de forma temporal.