Presente en el salón de Tokio, el Nissan IDS Concept supone un paso importante para el objetivo de la marca japonesa en 2020: incorporar tecnologías de conducción autónoma en sus coches de producción.
En la actualidad, la evolución en el sector de la automoción va, principalmente, en dos direcciones: la conducción autónoma y los módulos de impulsión eléctricos. El Nissan IDS Concept representa un gran avance en ambos campos y supone un paso importante hacia el objetivo de la marca japonesa para el año 2020: incorporar tecnologías de circulación sin conductor en sus coches de producción.
Dos modos de conducción
Este prototipo, que se exhibirá en el salón de Tokio, dispone de dos modos de conducción. En el Piloted Drive, el coche toma el control, aunque imitando el estilo de conducción y las preferencias del usuario. El volante se retrae, aparece una gran pantalla plana y los cuatro asientos pivotan hacia el centro para facilitar las conversaciones. En el Manual Drive, que se activa accionando el botón “PD Commander” situado entre los asientos delanteros, las plazas se sitúan en su posición convencional, el volante vuelve a aparecer y la luz interior pasa a ser de color azul. Si hubiera peligro de una colisión inminente, se activarían las tecnologías necesarias para asistir al conductor en la maniobra evasiva.
Amplia autonomía
En cuanto al apartado mecánico, lo único desvelado es que la mecánica eléctrica se alimenta de una batería con una capacidad de 60 kWh, capaz de generar una autonomía máxima de 600 kilómetros. La recarga puede realizarse sin cables.
Varias son las notas curiosas del prototipo. La apertura de las puertas traseras es hacia atrás, la carrocería está realizada en fibra de carbono y los neumáticos son muy estrechos, tan solo 175 milímetros, para reducir la resistencia al avance.
La nueva era de movilidad ya ha empezado para Nissan y, por lo visto en el IDS Concept, los pasos dados van en la dirección correcta.