Sí. Ha vuelto a pasar. Vivimos en el país de la pillería, y no son pocas las formas en las que buscamos el artificio para esquivar del sistema, pero a veces la imaginación va demasiado lejos… El jueves pasado la Guardia Civil que controlaba el tráfico en el carril Bus-VAO de la A-6 de Madrid dio el alto a un coche porque pensaba que llevaba en el asiento del copiloto a una niña. Pero no, era una muñeca. Y no es la primera vez que pasa.
Entre los datos que han trascendido de la detección se sabe que fue el jueves pasado alrededor de las 8 de la mañana. Tampoco sabemos cuánto tiempo llevaba el infractor cometiendo esta irregularidad pero en su modus operandi hubo algunos detalles que extrañaron a la Guardia Civil y que provocaron el alto.
En primer lugar, la muñeca que llevaba de copiloto era la de una niña. Hace unos años también fue noticia la detección de un conductor que llevaba una muñeca para hacerla pasar por un ocupante más y poder así circular por el Bus-VAO. Pero en aquella ocasión era una muñeca hinchable. En esta ocasión el pequeño tamaño del ‘acompañante’ llamó la atención de la autoridad. No entendían que un niño ocupara la plaza delantera. Pero cuando estaba cerca, también les extrañó la ropa que llevaba, excesivamente abrigada cuando ya ha llegado el verano: forro polar azul, pantalones negros, gafas de sol, gorra y auriculares… Fue entonces cuando decidieron darle el alto y se descubrió la jugada.
Esta infracción está recogida en el Reglamento General de Circulación, en su artículo 35.1 apartado A donde se dice de forma explícita que “la utilización del carril habilitado para VAO queda limitada a motocicletas, turismos y vehículos mixtos adaptables, y está prohibida, por tanto, al resto de vehículos y conjuntos de vehículos, incluidos los turismos con remolque, así como a peatones, ciclos, ciclomotores, vehículos de tracción animal y animales”. Y la infracción de la multa asciende a 200 euros.
