La firma del triple diamante sigue apostando por Europa a pesar del ruido de hace unos meses de que podría abandonar Europa. Lo confirma la presentación del nuevo Mitsubishi Eclipse Cross PHEV, un SUV de corte cupé que actualiza su imagen y adapta la mecánica híbrida enchufable de la que ya presume el Mitsubishi Outlander PHEV. Ofrece tracción a las cuatro ruedas y homologa una autonomía en modo eléctrico de 45 km.
Por el momento no se han dado a conocer los precios con los que aterrizará ni los acabados en los que estará disponible aunque sí que se ha comunicado que llegará en marzo de 2021.
El modelo mantiene el perfil conocido aunque incluye numerosas novedosas estéticas fáciles de apreciar. Ha pulido su frontal con nuevos faros y un paragolpes más suave en sus formas, mientras que en la zaga se olvida de la luna partida para mejorar la visibilidad desde el retrovisor. Esto obliga a un reposicionamiento de elementos, aunque mantiene sus pilotos en una posición alta y destacada, ahora con un nuevo diseño de su firma luminosa.
En el interior, los principales cambios llegan a los asientos, donde incluyen una combinación de tejido en relieve y cuero sintético, mientras que los de cuero ahora se muestran con un tono gris claro que se suma al negro habitual. Además, los paneles de las puertas combinarán con el color de los asientos.
El Mitsubishi Eclipse Cross PHEV adapta el bloque mecánico que ha obtenido importantes éxitos en el Outlander. Este se compone de un motor gasolina de 2,4 litros con dos eléctricos, uno sobre cada eje donde, gracias a un excelente entendimiento entre los tres, ofrecerán hasta 45 km sin emisiones (la batería es de 13,8 kWh), mientras que en momentos puntuales, uno o ambos motores eléctricos apoyarán al térmico para reducir el consumo.
El conductor dispondrá de tres modos de uso de los motores: EV, donde se prioriza el modo eléctrico; modo híbrido, donde el motor térmico generará energía para las baterías que emplearán los eléctricos al mover el coche; y el modo híbrido paralelo donde el gasolina será el protagonista y se apoyará en los eléctricos en momentos puntuales reducir gasto de carburante.
Además, a estos se suman otros cuatro modos de conducción para adecuar la respuesta del vehículo al terreno que se pisa: Normal, proporciona la dirección y estabilidad adecuadas para todo tipo de situaciones; Nieve, adapta la entrega del par a las situaciones resbaladizas; Grava, que permite una conducción y estabilidad en carreteras con poco agarre; y Tarmac, pensada para carreteras asfaltas y con muchas curvas.