Si comparamos la imagen del Mercedes-Benz GLK, con la del nuevo Mercedes-Benz GLC nos damos cuenta de la metamorfosis que ha sufrido este todocamino. Si la primera generación presentaba una imagen cuadrada y tosca, esta segunda muestra unas líneas más fluidas.
Más grande
Atendiendo a los 4,65 metros de longitud que mide, es 12 centímetros más largo que su predecesor, cinco centímetros más ancho y dos más bajo. Con estas medidas, el GLC gana en habitabilidad interior y en capacidad de maletero, que ahora tiene 550, frente a los 450 que ofrecía anteriormente.
El exterior ofrece una imagen más limpia y estilizada, con unos faros delanteros que, opcionalmente pueden equipar tecnología LED para todas las funciones. Por su parte, los parachoques disponen de protecciones en los bajos con tres formas diferentes dependiendo de si es el modelo básico, la terminación off-road o el deportivo AMG.
En cuanto a las llantas, de serie monta 18 pulgadas, incluidas en el acabado “EXCLUSIVE”, mientras que la terminación “AMG Line” sube hasta las 19 pulgadas. Existe una última opción con una medida de 20 pulgadas.
Para España
En el momento de su lanzamiento, en nuestro país estarán disponibles únicamente las dos motorizaciones de gasóleo. Existe un propulsor de gasolina GLC 250 de cuatro cilindros con turbo, que entrega 211 CV; así como otro híbrido, denominado GLC 350 e.
Centrados ya en las opciones turbodiésel, comentar que se trata de dos mecánicas tetracilíndricas con una potencia de 170 CV y 400 Nm de par en el caso del GLC 220 d, y 240 CV y 500 Nm de par en el GLC 250 d. Ambas equipan, de serie, un cambio automático con convertidor de par 9G-TRONIC de nueve velocidades, asociado a la tracción total.
Por su parte, el híbrido recurrirá a la última evolución de la caja de cambios automática 7G-TRONIC PLUS, con siete relaciones.
Más ligero
La metamorfosis del GLK en el nuevo Mercedes-Benz GLC se ha dejado notar en el peso total del conjunto. Aunque ahora es más grande, también es más liviano, concretamente 80 kilogramos menos con respecto a la primera generación. Para ello se ha recurrido al uso de materiales compuestos, más ligeros aunque sin perder resistencia.
Uno de los puntos donde se ha reducido el peso ha sido en la suspensión, en especial en el sistema de suspensión neumática opcional “AIR BODY CONTROL”. De serie equipa muelles de acero y amortiguadores de dureza variable “AGILITY CONTROL”. Igualmente, el conductor tiene a su disposición, de serie, un control dinámico de la conducción “DYNAMIC SELECT” con cinco opciones: “INDIVIDUAL”, “SPORT”, “SPORT+”, “COMFORT” y “ECO”.
Entre burbujas
Esta nueva generación viene plagada de equipamiento tecnológico y de seguridad para que la vida a bordo sea lo más cómoda y fiable para el conductor y los ocupantes. Entre los elementos que ofrece de serie el nuevo GLC encontramos un asistente de frenado de emergencia en ciudad “COLLISION PREVENTION ASSIST PLUS” o un sistema de alerta por cansancio del conductor “ATTENTION ASSIST”. Entre las opciones aparecen la dirección asistida variable “DISTRONIC PLUS”, un asistente de frenada de emergencia con detección de peatones “PRE-SAFE Brake”, un sistema de control del ángulo muerto o el asistente de mantenimiento de carril “Lane Keeping Assist”.
MERCEDES-BENZ GLC 250 d 4MATIC | |
Tipo de motor | Diésel, 4 cilindros en línea, turboalimentado |
Cilindrada | 2.143 cm3 |
Potencia | 204 CV a 3.800 rpm |
Par máximo | 500 Nm a 1.600 rpm |
V. máxima | 222 km/h |
Aceleración | 7,6 s (0 a 100 km/h) |
Consumo | 5,0 l/100 km |
Medidas | 4.656 / 1.890 / 1.644 mm |
Neumáticos | 235 / 60 R 18 |
Peso en vacío | 1.845 kg |
Maletero | 550 l |
Precio base | 49.900 € |
Lanzamiento | Septiembre de 2015 |
Versión | Potencia | Precio desde |
Diésel | ||
GLC 220 d 4MATIC | 170 CV | 47.900 € |
GLC 250 d 4MATIC | 204 CV | 49.900 € |