La web Carscoops se ha hecho eco a través de los medios Spiegel y Jalopnik de que Mercedes-Benz habría alquilado y causado daños en un Tesla Model X alquilado a la empresa también alemana Sixt por valor de 15.674 euros.
Según estos medios, Mercedes-Benz se encuentra en pleno proceso de desarrollo del segundo modelo de la familia de eléctricos EQ que la marca comenzará a comercializar a partir de 2019. Como parte del desarrollo de este nuevo vehículo, la firma de la estrella habría decidido echar un vistazo y testar el Model X para conocer de primera mano la competencia.
De esta manera, la marca de Stuttgart habría alquilado un Tesla Model X durante 7 semanas, en vez de hacerse con una unidad nueva, un vehículo cuya propiedad es de Monika Kindlein y Manfred van Rinsum. La pareja ha sido la encargada de dar a conocer los importantes daños que sufría el vehículo.
Los diferentes medios que se han hecho eco de la noticia comentan que el coche ha sido sometido a diferentes tipos de pruebas y condiciones extremas, además de ser desmontado y vuelto a montar. Al parecer, fue testado en circuitos de Barcelona y Sindelfingen (Alemania), un hecho que curiosamente estaba prohibido en el acuerdo de alquiler.
Según Sixt, los propietarios han sido compensados por los daños y por el hecho de que su coche ha sido utilizado de forma inadecuada. Sin embargo, Kindlein y Van Rinsum no han quedado satisfechos con el daño estimado que Mercedes ha causado: los citados 15.674 euros en destrozos más 2.000 euros de devaluación del coche.
Lejos de estar de acuerdo con estas cifras, la pareja cree que deberían reembolsarles 99.392,79 euros, aunque no se muestran demasiado optimistas en obtenerlos, debido a los recursos de Daimler o Sixt en comparación con los suyos, si los hechos finalizaran en los tribunales.
Por su parte, Mercedes-Benz únicamente ha defendido a través de un portavoz que el alquiler de vehículos “con fines comparativos” es un hecho “muy frecuente” en la industria del automóvil y que, en caso de daños en el periodo de alquiler, se inicia un procedimiento “normal” de reclamación con las aseguradoras.
