El futuro de coche es definitivamente eléctrico. Así lo están interpretando las grandes marcas de automóviles y ya se está cobrando grandes víctimas, como los motores de Mercedes-Benz. Las mecánicas de combustión del gigante alemán no están en los planes de desarrollo del fabricante, destinando todos los recursos para el motor eléctrico.
Así lo ha confirmado el jefe de desarrollo de Daimler, Markus Schaefer, en declaraciones a la publicación alemana Auto Motor Sport. El anuncio no es casual, ya que Mercedes-Benz ha sido una de las marcas más activas del mercado en el desarrollo y lanzamiento de coches eléctricos, con el SUV EQC como máximo estandarte de este cambio de rumbo.
La última creación de la prolífica y premiada saga de motores de Mercedes es la nueva generación de propulsores de seis cilindros en línea, presentes en modelos de alta gama como la Clase E o la Clase S. ¿Será la última de la historia? El fabricante no lo descarta, aunque se encomienda a la evolución del mercado.
Lo que sí es cierto es que la apuesta e inversión por los coches eléctricos es firme. Es la prioridad del grupo Daimler actualmente. Su subsidaria smart acaba de renovar su gama de eléctricos y eliminará todos sus vehículos con motores de combustión en 2020.
Por otro lado, su división de furgonetas y vehículos comerciales Mercedes-Benz Vans ya ha presentado modelos totalmente eléctricos como la eVito, que ya está a la venta, eSprinter y la EQV, la furgoneta de ocho plazas y 405 km de autonomía que ha debutado Salón de Frankfurt.
En tercer lugar, en el capítulo de turismos y SUV, la misma feria fue el escenario elegido para la presentación de la nueva gama de híbridos enchufables bajo la denominación EQ Power. No sólo se electrificarán las gamas más altas, como venía sucediendo hasta ahora, también las de acceso, como la Clase A, y los SUV GLC y GLE.
Por último, Daimler ha anunciado en los últimos días que está trabajando ya en el desarrollo de un coche deportivo AMG totalmente eléctrico. Pero Schaefer asegura que la intención del grupo es ir desarrollando nuevos modelos paso a paso, apostando a corto plazo por los híbridos enchufables con motores eléctricos más potentes y baterías de mayor duración.
En el largo plazo, Los planes de Mercedes-Benz pasan por desarrollar sus coches eléctricos de lujo, como el EQS. También pretende crear sus propias baterías, invirtiendo 1.000 millones de euros en la instalación de ocho fábricas en todo el planeta.