La autoridad alemana del transporte KBA ha realizado una llamada a revisión del Volkswagen Touareg; concretamente, afecta a 57.600 unidades, equipadas con el motor 3.0 diésel Euro 6.
Esta acción se lleva a cabo tras haberse detectado dos dispositivos ilícitos de control de emisiones, según Automotive News Europe. Las autoridades alemanas ya pidieron el examen en julio de 22.000 Porsche Cayenne en Europa, un modelo que comparte plataforma y propulsores con el Touareg.
Por su parte, la automovilística ha ajustado la producción de su SUV más grande; asimismo, ha desarrollado un nuevo software para la mecánica que ayuda a solucionar el problema en los vehículos afectados, explica KBA.
Volkswagen espera que las pérdidas debidas al escándalo de las emisiones alcancen de cuatro a cinco billones de euros en 2018. Hasta el momento, el caso ya ha costado a la compañía más 25 billones de euros y ha contribuido a su cambio de estrategia, que ha girado hacia los coches eléctricos.
