Te enseñamos cómo limpiar perfectamente el techo de tu coche
Cuando el
tapizado del
techo de tu
coche presenta un “colorcillo” tirando a negro zaino… ha llegado el momento de someterlo a una limpieza urgente. Para ello no necesitarás invertir ni mucho dinero, ni demasiado tiempo, ni engañar a tu mayordomo…. Te contamos como limpiar esa parte del
vehículo en cuatro sencillos pasos.El humo del tabaco, los lápices de colores de tus hijos o, simplemente, el paso del tiempo pueden convertir el interior de tu coche en un foco de gérmenes y suciedad, poco recomendable para la salud de los ocupantes. Además de por pura higiene, y por lo “bonito” que puedas dejarlo, tras aplicar una limpieza con
productos específicos, el interior de tu viejo coche volverá a resplandecer como el primer día. ¿ No te lo crees? Sigue leyendo y… comprobarás que no exageramos.
PASOS A SEGUIR
1. Elige bien el producto
Lo primero que debes hacer es adquirir un
limpiador específico. Nosotros hemos elegido uno de la firma
Megiar’s. Para aplicarlo también debes contar, por lo menos, con tres
bayetas de microfibra. En nuestra prueba, hemos “rejuvenecido” el techo de un
BMW 530d con ocho años de antigüedad y… varios miles de kilómetros encima.Lo primero que debes hacer es aplicar el producto sobre una zona poco visible, por ejemplo, debajo de uno de los
parasoles, para comprobar que el limpiador no descolore el tejido
.[spacer color=”000000″ icon=”fa-cubes”]2. Limpia poco a poco
Es importante limpiar pequeñas partes del techo. Si aplicamos una cantidad excesiva del producto, corremos el riesgo de que se seque antes de retirarlo, perdiendo su eficacia.
[spacer color=”000000″ icon=”fa-cubes”]3. Ten paciencia
Espera el tiempo que recomienda el fabricante (en este caso, unos treinta segundos), para que actúe correctamente
. Como podrás observar, el limpiador resulta efectivo tanto sobre
tejidos como
plásticos (como el de los asideros, por ejemplo).
[spacer color=”000000″ icon=”fa-cubes”]4. Extiende con delicadeza
A continuación, utiliza una de las bayetas para repartir el producto. Frota la zona con suaves movimientos laterales, para comprobar cómo el limpiador consigue extraer la suciedad del
tapizado. Al pasar la bayeta varias veces, “atraparás” esa suciedad sin ningún esfuerzo. Si la zona a limpiar acumula una suciedad excesiva, puedes repetir este paso.
[spacer color=”000000″ icon=”fa-cubes”]5. Asómbrate
El resultado final es espectacular. Pasa la mano y comprobarás que el
tejido tiene un tacto mucho más esponjoso. La suciedad ha desaparecido y el tono de todos los elementos ha recuperado su aspecto original. Lo mejor de este “AUTOBRICO” es que te habrás gastado poco dinero y el tiempo que habrás invertido no superará los treinta minutos. ¡Fácil!