Sí, Lada compite en el Mundial de Turismos (WTCC), pero no traslada esa imagen deportiva a las calles. Al menos hasta ahora. El Lada Kalina NFR es el más deportivo y rápido del catálogo, un utilitario “picante” que, sin embargo, no acude a grandes tecnologías ni grandes dosis de potencia. No obstante, es probablemente el Lada más atractivo de los últimos años.
Actualmente 136 CV de potencia en un coche de corte deportivo es francamente poco, pero hablamos de un modesto Lada que no pretende batirse en duelo con los “cocos” de la categoría. Acude a un motor atmosférico 1,6 litros de cuatro cilindros con una potencia de 136 CV y un par máximo de 154 Nm. Modesto, sí, pero también se monta sobre un coche ligero que apenas supera los 1.200 kilos.
Acelera de 0 a 100 km/h en 9,2 segundos, nada mal para un coche económico, con una velocidad punta de 203 km/h. Lo más impresionante, comparado con algunos de sus competidores, es el consumo medio homologado, fijado en 8,4 l/100 km. Claro, que este modelo en concreto seguro no tiene pensado realizar grandes números en un mercado europeo donde la eficiencia prima.
Además de la mecánica más potente y las mejores prestaciones, el Lada Kalina NFR se deja también a un estilo más deportivo y personal. Los cambios frente a un Kalina estándar son sustanciales, empezando por un paragolpes delantero más deportivo, con mayores tomas de aire, o por un capó que también extrae, no sabemos si de forma funcional, aire del vano motor.
La trasera se desmarca con una especie de difusor, un alerón de techo y un tubo de escape a la vista. Las llantas de 16 pulgadas parecen incluso más grandes sobre esos pasos de rueda. En el interior, unos asientos deportivos con costuras en color naranja y un sistema multimedia con pantalla de 7 pulgadas.
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