Concebido en los centros de diseño de Corea y Alemania, el nuevo urbano de Kia mantiene las dimensiones compactas del anterior para moverse con agilidad en la ciudad, anuncia un gran equipamiento y, según la marca, también un atractivo precio, aunque aún no se ha anunciado cual será. Os informaremos cuando los sepamos; en todo caso será antes del mes de mayo, que es la fecha fijada para llegar a los concesionarios.
Podrá equipar llantas de 14 o 15 pulgadas y todas las versiones serán con carrocería de cinco puertas. No está prevista una versión de tres.
Exteriormente mide 3,595 metros, lo mismo que la generación anterior pero, como ha aumentado 15 milímetros su distancia entre ejes, puede ofrecer más espacio para los pasajeros y alcanzar los 255 litros de capacidad del maletero, lo que le sitúan entre los más espaciosos de su categoría, mientras que los respaldos de los asientos traseros pueden abatirse con un solo toque y dejar una plataforma totalmente plana de 1.010 litros de capacidad.
Una serie de botones físicos a los lados de ella se encargan de hacer más fácil las operaciones más usuales una vez en marcha. Una buena idea, igual que la del apoyabrazos central delantero desplazable, que cubre un compartimento que puede alojar hasta una botella de un litro.
Aún no están definidos los acabados que llegarán al mercado español, aunque nos aseguran que el deportivo “GT-Line” será uno de ellos y que estará disponible para más de una mecánica.
A finales de año llegará el nuevo 1.0 T-GDI, turboalimentado de tres cilindros, con 100 CV de potencia. Un propulsor que ya probamos en la presentación del nuevo Kia Rio y nos sorprendió agradablemente por su suavidad y capacidad de aceleración.
Todos los motores están asociados a una caja de cambios manual de cinco velocidades engranada al eje delantero. Para el propulsor de 1,25 litros existe la alternativa de una caja automática con cuatro velocidades, del tipo convertidor de par.
La mayoría de usuarios del nuevo modelo lo conducirán por ciudad. Es por eso que la marca ha decidido equiparle, con buen criterio, con el Asistente de Frenada de Emergencia “AEB”, que evita en gran medida las colisiones por alcance y aumenta la seguridad en el tráfico urbano.
Como el resto de modelos de la marca, el Picanto está cubierto por una garantía de siete años o 150.000 kilómetros.
Está claro que ha llegado un gran rival en el competido segmento de los coches urbanos.
Texto: J.Miguel Quintana.